Foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
Durante el proceso de selección para cargos jurisdiccionales, Daniel Jerezano, candidato al cargo de juez en materia civil, mercantil y familiar, expuso una postura crítica hacia ciertos sectores del Poder Judicial. En entrevista con NotiPress, afirmó cómo existen conductas excluyentes hacia aspirantes quienes no pertenecen a la carrera judicial, actitud que podría limitar la diversidad de perfiles en el sistema.
Sin confrontar directamente a instituciones, señaló que varios operadores internos suelen cuestionar la capacidad de abogados externos para ejercer funciones de juzgadores. Esta descalificación, según explicó, no tiene sustento en los criterios legales exigidos para la función. "Hay jueces que critican nuestra participación porque no tenemos carrera judicial, y ahí está el error", expresó.
Desde su experiencia, explicó que la formación jurídica proviene de distintas trayectorias profesionales, por lo tanto, el acceso a un cargo público no debería depender exclusivamente del paso por la estructura judicial interna. Rechazó las críticas basadas en la idea sobre quienes no han redactado sentencias desde dentro carecen de competencia para hacerlo.
Narró su recorrido profesional por distintos ámbitos, entre ellos la docencia, el litigio en múltiples estados y el ejercicio público en niveles federales. En sus palabras, esta diversidad permite una visión más cercana a las necesidades sociales y una lectura más amplia de la realidad jurídica. De acuerdo con su testimonio, algunos juzgadores ignoran esas contribuciones externas.
Criticó además una cultura profesional la cual, en sus palabras, desvaloriza los saberes obtenidos fuera de las estructuras judiciales tradicionales. Aseguró cómo esta visión genera una división innecesaria entre quienes ejercen desde fuera y los miembros formales del sistema. Según su declaración, "son licenciados en derecho igual que nosotros; la diferencia es el ámbito en el que se han desempeñado".
Frente a esta situación, planteó la necesidad de abrir espacios institucionales a más perfiles provenientes de distintas ramas del derecho. Dijo que no se puede reducir la legitimidad de una aspiración judicial al lugar de procedencia del candidato. Insistió en la idea de cómo el conocimiento legal no pertenece exclusivamente a quienes forman parte del aparato judicial.
Reivindicó la capacidad de análisis, interpretación y aplicación de la ley ejercida por abogados en diferentes entornos, incluyendo foros académicos y litigios fuera del estado. Relató su intervención durante años en procesos civiles, mercantiles, penales, electorales e incluso en derecho minero, área relevante en su región de origen.
En su intervención, pidió evaluar la preparación de los aspirantes por su formación integral y no por criterios internos de permanencia. Indicó que todos los profesionales del derecho deben tener oportunidades equitativas si cumplen con los requisitos establecidos por las leyes respectivas.
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