Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
Las políticas migratorias propuestas por Donald Trump podrían afectar a más de 4.9 millones de mexicanos en situación no autorizada, según un informe del Colegio de la Frontera Norte (Colef). Texas, California e Illinois concentran la mitad de esta población, aunque el fenómeno abarca la totalidad del territorio estadounidense.
De acuerdo con el boletín estadístico 2025 de El Colef, en Estados Unidos residen 332.3 millones de personas, de las cuales poco más de 39 millones son de origen mexicano. Entre ellos, el 13% no cuenta con autorización legal para residir en el país, es decir, 4,926,393 personas.
El informe detalla que la metodología utilizada para determinar esta cifra se basa en un modelo residual, el cual descarta a quienes reciben beneficios gubernamentales o trabajan en sectores que requieren licencias profesionales. Bajo este esquema, la mayoría de los mexicanos no autorizados provienen de estados como Veracruz, Guanajuato, Oaxaca, Michoacán, Jalisco, Guerrero, Chiapas, Hidalgo, San Luis Potosí y Puebla.
Asimismo, en cuanto a la distribución de la población mexicana no autorizada, el 65% tiene entre 30 y 54 años, y el 44% son mujeres. Además, siete de cada diez han vivido en Estados Unidos por más de una década, lo que indica un arraigo considerable en la sociedad estadounidense. En un discurso a horas de su toma de posesión, Trump dijo que planea declarar la emergencia en la frontera sur en su primer día de gobierno.
Respecto a las posibles deportaciones, el informe advierte sobre los impactos sociales y económicos, ya que el 72% de los mexicanos no autorizados forman parte de la fuerza laboral, principalmente en los sectores de construcción, servicios y manufactura. En caso de aplicarse las medidas de deportación masiva anunciadas por Donald Trump, estos sectores podrían experimentar un impacto significativo.
En el ámbito familiar, se estima que 3.4 millones de hogares en Estados Unidos tienen al menos un integrante mexicano en situación no autorizada. De estos, 1.7 millones incluyen menores de edad, lo que podría derivar en separaciones familiares y otros efectos negativos en la niñez migrante.
A pesar del discurso político que califica a los migrantes mexicanos como "ilegales", el documento al que accedió NotiPress expresa, nueve de cada diez son ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes legales. En este sentido, el estudio cuestiona que las medidas propuestas podrían violar derechos de personas con estatus legal en el país
DESCARGA LA NOTA SÍGUENOS EN GOOGLE NEWS