La banca de Moisés Cohen, arte en la vida cotidiana

 05-12-2019
Alan Hernández
   
Portada | Actualidad
Foto: Pedro Basilio (NotiPress)

Foto: Pedro Basilio (NotiPress)

Durante la presentación de libro "Una banca, un testigo discreto", el artista plástico, Moisés Cohen recibió la crítica de personalidades de la vida cultural mexicana sobre las cualidades de su obra. Entre los invitados, estuvieron Eduardo Villegas Megías, coordinador de memoria histórica y cultural de México; Leila Driben, crítica de arte; Luis Ignacio Sáinz, ensayista y la escritora Elena Poniatowska.

El libro relata el trabajo y la importancia de la obra "Ludiculus" que forma parte de la exposición colectiva permanente Diálogo de Bancas, que desde 2006 se puede apreciar en Paseo de la Reforma en la Ciudad de México y sirve para llevar el arte a la vida cotidiana.

Uno de los objetivos de Cohen es darle peso a las inquietudes de las líneas y crear esculturas caligráficas. La letra se convierte en arte y según el artista es vital para la cultura escrita ya que viene inherente a lo humano porque es una forma de comunicación necesaria y hay una necesidad de expresión.

Según Leila Driben, crítica de arte de origen argentino radicada en México, dice que las obras son un enigma porque a veces dan un contenido a las palabras que inventa con los signos de lenguajes distintos y remotos en el tiempo y en el espacio.

También en la obra se combina la escultura y la pintura con la caligrafía, retomando el simbolismo de la palabra escrita, además una de las características es el movimiento inmerso en las obras, rotadas sobre su propio eje, como lo define Cohen. Hay una convivencia de una comunicación escrita, el material de acero va cambiando de color en su oxidación natural, la parte heterea de la letra la pasa por un peso visual y la convierte en un diálogo amable y fácil para el espectador.

Cohen en una entrevista exclusiva para la agencia NotiPress expresó: "cuando tu ves un alfabeto, independientemente porque conoces su significado, el alma del alfabeto no necesariamente es la parte plástica, normalmente ha evolucionado en plasticidad, sabe expresar algo y es una necesidad para comunicarte como humano y sabes que hay un emisor, un receptor y un mensaje".

Igualmente, según el artista plástico el hecho de una obra es producir emociones y placer por mirarse y tener la necesidad de expresarse porqué la belleza está en los ojos en el que mira y una de las características de las esculturas es que la gente se pueda comunicar.

Y la obra del artista plástico invita al transeúnte a tomar un descanso en ella, convivir, apreciar el paisaje y ser parte de la misma manifestación artística. El arte en la vida cotidiana. "Ludiculus" se compone por una banca de una sola pieza, con los característicos toques sensuales de las curvas caligráficas que el autor retoma en sus esculturas, así como los profundos significados de los vocablos tomados del árabe y hebreo.




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