Foto: Gobierno de México
El gobierno federal intensificó sus acciones de seguridad en Culiacán, Sinaloa, en respuesta a la violencia generada por conflictos internos entre facciones del crimen organizado. En el informe de seguridad presentado el 12 de noviembre de 2024, el Gabinete de Seguridad señaló que, como parte de esta estrategia, se han realizado múltiples operativos de vigilancia y patrullaje, lo que ha resultado en la detención de 39 presuntos criminales. Este despliegue responde a un aumento de homicidios en la región en los últimos meses, derivado de enfrentamientos entre grupos rivales.
De acuerdo con las autoridades, Culiacán se convirtió en un punto crítico para el combate a la delincuencia organizada debido a la concentración de actividades delictivas, especialmente relacionadas con el narcotráfico y otros delitos de alto impacto. Los operativos en la región han sido coordinados por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, en colaboración con la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional y la Secretaría de Marina, con el objetivo de contener la violencia y mejorar la seguridad en la zona. A su vez, el Centro Nacional de Inteligencia y la Fiscalía General de la República han brindado apoyo con labores de inteligencia para identificar y desarticular células criminales activas en el municipio.
El reforzamiento de la seguridad en Culiacán incluye la focalización de esfuerzos en zonas de alto riesgo y la promoción de la denuncia ciudadana. Las autoridades reportan un incremento en el número de denuncias, lo que atribuyen a una mayor confianza de la población en los cuerpos de seguridad. Este factor es considerado clave en la estrategia para reducir los índices delictivos, ya que permite un mejor flujo de información y una intervención más precisa en áreas donde los grupos delictivos ejercen influencia.
Entre las detenciones recientes, destaca la de individuos vinculados con extorsión y narcotráfico, quienes están identificados como presuntos generadores de violencia en la región. Uno de los casos notables es el de Marcelino N., quien presuntamente lideraba una célula criminal activa en Culiacán y ha sido señalado por su participación en operaciones de tráfico de narcóticos.
El despliegue de efectivos de seguridad y las detenciones realizadas son parte de un esfuerzo mayor para frenar la violencia en Sinaloa, uno de los estados con altos niveles de criminalidad en el país. Las autoridades aseguran que continuarán con esta estrategia de vigilancia y operativos coordinados, mientras buscan restaurar la tranquilidad en Culiacán y reducir el impacto de las pugnas entre grupos delictivos en la vida cotidiana de la población.
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