Ciudad de México,
Brenda Rodríguez
Crédito foto: Gustavo Torres (NotiPress)
Tras un alarmante aumento de agresiones con jeringas en el Metro de la Ciudad de México, el Congreso capitalino aprobó una nueva reforma legal. En respuesta a una preocupante serie de agresiones en el metro de la Ciudad de México, tipificando estos ataques como delito, con penas que incluyen años de prisión y severas multas.
Desde mediados de marzo hasta el 27 de mayo, se reportaron 120 casos de personas agredidas con sustancias inyectadas en diversas estaciones del Sistema de Transporte Colectivo (STC). Las víctimas describieron síntomas como mareos, náuseas y somnolencia, provocados por lo que las autoridades confirmaron eran sustancias como THC, benzodiacepinas, fenciclidina y cocaína.
Aunque la Fiscalía General de Justicia de la CDMX (FGJ CDMX) aseguró que las dosis detectadas no representaban un riesgo grave para la salud, las denuncias encendieron las alarmas públicas. En respuesta, el Congreso de la CDMX aprobó el 27 de mayo una iniciativa impulsada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, sancionando los pinchazos con multas que van de 50 a 300 días de salario, equivalentes a entre 13,940 y 83,640 pesos, y penas de 2 a 5 años de prisión, que podrían aumentar hasta 7 años y medio si existen agravantes. Además, se implementó un operativo de seguridad con más de 5 mil 800 elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) desplegados en estaciones del Metro.
Las autoridades hicieron un llamado a las personas que puedan ser víctimas de pinchazos a permanecer dentro de las instalaciones del Metro y solicitar apoyo inmediato a los elementos policiales presentes en los andenes. Con esta medida, el Gobierno capitalino busca frenar una ola de violencia que ha puesto en riesgo la seguridad de miles de usuarios que diariamente utilizan este sistema de transporte.