Foto: Gustavo Torres (NotiPress)
De acuerdo con Andrés Manuel López Obrador (AMLO), si la reforma electoral no es aprobada, el mandatario iniciaría un proceso de modificación de leyes secundarias como parte de su Plan B. Al respecto, aseguró en la conferencia matutina del 16 de noviembre de 2022 que busca la manera de avanzar en materia de democracia y prevención de fraude electoral sin violar la constitución. Por ello, sus medidas para ejercer un plan secundario incluyen la reducción del financiamiento electoral y prevención sobre la compra de votos.
A través de sus redes sociales, el Instituto Nacional Electoral (INE) informó que las elecciones en México son las más caras del mundo. Bajo esta línea, comentó que la desconfianza en los actores políticos del país generó la necesidad de contar con mayores atribuciones y responsabilidades, por lo cual han requerido más recursos.
La propuesta de reforma electoral fue presentada por el presidente el 28 de abril de 2022, y entre sus puntos clave incluye la reducción de financiamiento de partidos políticos y costos electorales. Asimismo, plantea una mayor participación ciudadana y el reemplazo de las facultades del INE por el nuevo Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC).
Con motivo de la creación del INEC, miembros de la oposición de la 4T y ciudadanos de la Ciudad de México se reunieron el 13 de noviembre para protestar contra la reforma. Sobre ello, el Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova, felicitó las movilizaciones, mismas que calificó como acciones en defensa de la democracia y sistema electoral.
En respuesta a las protestas por la reforma electoral, AMLO comentó en rueda de prensa el 15 de noviembre de 2022 que las presuntas agresiones al órgano electoral no tienen fundamento. Según el presidente, la reforma busca fortalecer la democracia con los recortes y modificaciones emitidas para prevenir los fraudes electorales.
No obstante, en rueda de prensa el presidente señaló que la reforma electoral aún se encuentra en deliberación, y podría no contar con los votos necesarios para su aprobación en la Cámara de Diputados. Aunado a ello, resaltó que como ejercicio constitucional, la mayoría simple no basta para aprobarla, por lo cual se requieren al menos 66% de votos, equivalentes a dos terceras partes.
Asimismo, comentó que en caso de requerir un Plan B, las medidas se limitarían a reducir el presupuesto del INE y prevenir la compra de votos durante las elecciones. Por su parte, Ricardo Monreal advirtió en conferencia de la JUCOPO que el Plan B de AMLO no tiene el alcance constitucional adecuado. Ello especialmente con respecto a los principios de representación proporcional y de mayoría relativa del INE.
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