Foto: YouTube Claudia Sheinbaum
La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, anunció a Víctor Rodríguez Padilla como el nuevo director general de Petróleos Mexicanos (Pemex). Este nombramiento marca un giro en la gestión de la empresa estatal, con la llegada de un experto de larga trayectoria en el sector energético.
Rodríguez Padilla, quien cuenta con casi 40 años de experiencia, es reconocido por su labor académica e investigadora en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde se especializa en "Economía y política de la energía". Además, posee un doctorado de la Universidad de Grenoble, Francia, centrado en concesiones y contratos petroleros en países en desarrollo, lo que le confiere una sólida base teórica y práctica para liderar Pemex en un momento crucial para la industria.
En sus primeras declaraciones tras el nombramiento, Rodríguez Padilla adelantó que en los próximos días presentará a su equipo de trabajo y subrayó que su gestión no se limitará a las energías fósiles. "La empresa petrolera va a tener un cambio", afirmó, destacando que su enfoque será diversificar las operaciones de Pemex para adaptarse a un panorama energético global en transformación.
Además, el nuevo director de Pemex señaló que trabajará en estrecha colaboración con Luz Elena González, próxima secretaria de Energía, y Rogelio Ramírez de la O, actual secretario de Hacienda. Esta coordinación entre distintas áreas del gobierno es vista como un esfuerzo por consolidar la estrategia energética del país.
Uno de los retos principales que enfrentará Rodríguez Padilla será mantener la producción de petróleo en 1.8 millones de barriles diarios, objetivo que considera fundamental para abastecer las refinerías nacionales. Al respecto, comentó: "En este gobierno se hizo una parte muy importante también de aumento de la producción. La producción venía cayendo por madurez geológica, efectivamente, pero también por falta de inversión, descuido, negligencia".
Con su nombramiento, se espera que Rodríguez Padilla impulse una nueva era en Pemex, abordando no solo los desafíos inmediatos de producción, sino también preparándose para un futuro energético más diversificado y sostenible.
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