Ciudad de Buenos Aires,
Axel Olivares
Crédito foto: Vocería Presidencial
El gobierno disolvió la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) para reemplazarla nuevamente por la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE), la cual estará a cargo de cuatro nuevas secretarías. La AFI fue creada durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner luego de que el antiguo servicio de inteligencia SIDE se viera envuelto en el escándalo por el asesinato del fiscal Alberto Nisman en 2015. Finalmente, el gobierno de Javier Milei decidió recomponer la dependencia coordinándola con el ministerio de Seguridad y de Defensa. La nueva Secretaría dependerá directamente del Presidente de la Nación y estará a cargo del secretario, Sergio Neiffert.
Según publicó la oficina del Presidente, la agencia manejará cuatro secretarías:
La SIDE también controlará el presupuesto de la dirección nacional de inteligencia criminal (DNIC) del Ministerio de Seguridad y de la dirección nacional de inteligencia estratégica militar (DNIEM) del Ministerio de Defensa.
Este conjunto de modificaciones sobre la estructura del Sistema de Inteligencia Nacional permitirá la consolidación de una visión estratégica y moderna, y garantizará el balance entre las distintas agencias, alejando cualquier interés personal, partidario o contrario al engrandecimiento de la Patria", publicó la secretaria del presidente en su cuenta de X.Durante su conferencia de prensa en Casa Rosada el 16 de julio, el vocero presidencial, Manuel Adorni, comentó sobre el decreto nacional 614/24 y de la disuelta AFI. "Durante años, la agencia federal de inteligencia fue la cara visible de la decadencia argentina donde, en lugar de destinar los fondos para la defensa de la nación y de la seguridad de los argentinos, se destinaban con otros fines como el espionaje político, la persecución ideológica y el tráfico de influencia", afirmó Adorni.
Además, agregó que "a tal punto llegó esa decadencia que, cuando asumió el profesor Fernández en 2019, dijo en su discurso que los fondos reservados de la cartera de inteligencia se iban a destinar a la financiación del plan contra el hambre". Esta iniciativa fue luego suspendida.
Por otro lado, Adorni negó que la modificación del organismo de inteligencia tenga que ver con las supuestas escuchas ilegales por parte del exjefe de Gabinete, Nicolás Posse. Desde el gobierno afirman que esta era una reforma que se tenía pensada desde antes de la asunción de Milei para hacer más eficiente el sistema de seguridad.