Buenos Aires,
Axel Olivares
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress)
El vocero presidencial, Manuel Adorni, ofreció una conferencia de prensa en Casa Rosada el 8 de mayo. Entre los temas tratados, el portavoz habló sobre el paro general previsto para el 9 de mayo convocado por la Confederación General de Trabajo (CGT).
Acerca de la protesta, el vocero presidencial dijo que "no tiene una razón aparente". Aclaró que la línea telefónica 134 estará abierta para denunciar extorciones, como también advirtió que los empleados estatales que no trabajen en la jornada se les descontará el día. Por otro lado, las organizaciones sociales tienen la obligación de cubrir los gastos que el desarrollo de la marcha pueda ocasionar.
En otro orden de cosas, el vocero presidencial mencionó que el 9 de mayo "seis millones 593 mil personas no van a tener a disposición el servicio esencial de transporte para ir a sus trabajos, cuatro millones de personas no van a poder viajar en colectivo en el Área Metropolitana de Buenos Aires, 1 millón y medio de personas no van a poder hacerlo en el interior del país, 1 millón de personas no van a poder viajar entrenes y hay 93 mil personas que verán cancelados sus 703 vuelos ".
Adorni hizo un breve repaso del historial de paros a lo largo del periodo actual: "simplemente para hacer un listadito pequeño de lo que ha ocurrido desde el 10 de diciembre [fecha de asunción del presidente Javier Milei]. Nuestro Gobierno tuvo dos paros generales de la CGT, dos paros de colectivos, dos paros docentes, un paro de trenes, un paro de aeronáutico y más de cien marchas e intentos de piquetes".
Luego comparó estos datos con la cantidad de paros del gobierno anterior: "en cuatro años de Alberto Fernández, el cual terminó con 211% de inflación, 50% de pobres y 130 mil muertos bajo el lema de ‘el Estado te cuida’, tuvo cero paros". Al ir más atrás en el tiempo, Adorni mencionó que "desde 1983, el 64% de las 44 medidas de fuerza convocadas por la CGT fueron contra gobiernos no peronistas. O sea, prácticamente, dos de cada tres medidas fueron contra gobiernos no peronistas. Y dado el estado de las cosas, esta claro que esos gobiernos (peronistas) no han brillado precisamente por su eficiencia".
Sobre la CGT y las organizaciones sociales, Adorni dijo que "mañana paran los quieren seguir haciendo de la Argentina un camino de servidumbre", y se refirió a los dirigentes sindicales que convocan al paro como "fundamentalistas del atraso que cargan sobre las espaldas de los trabajadores a quienes piensan extorsionar a los argentinos para volver al poder".
Para finalizar, Manuel Adorni le envió un mensaje a la cúpula gremial: "esta administración les informa que solo van a ganarse el desprecio de todos aquellos que mañana quieren y, además necesitan, ir a trabajar. A esos argentinos que el gobierno va a representar y se siente orgulloso de que cada día confíen en el rumbo que se está llevando adelante". El mensaje del Gobierno en palabras del vocero presidencial fue una crítica férrea y también una advertencia para los líderes sindicales que impulsaron la medida.