Foto: Gustavo Torres (NotiPress)
El gobierno argentino ha reconocido que el sistema eléctrico enfrentará importantes desafíos durante el próximo verano. Esto debido a un aumento en la demanda energética y la falta de inversiones en infraestructura. Guillermo Francos, jefe de Gabinete, advirtió, habrá cortes programados de energía para evitar colapsos, contradictoriamente a lo expresado por Daniel González, secretario de Coordinación de Energía y Minería, quien había asegurado que no habría cortes planificados.
Francos mencionó, la situación se verá agravada por la parada técnica de la central nuclear Atucha I, que dejará de aportar 362 MW al sistema durante dos años. Además, las altas temperaturas previstas y el crecimiento de la demanda podrían generar un escenario crítico.
Va a tener que programarse algún corte, sobre todo hacer algunos acuerdos con los sectores productivos", señaló Francos en una entrevista, responsabilizando al kirchnerismo por la falta de inversión y el retraso tarifario acumulado.
Previsión oficial y riesgos de colapso
La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) estimó, el consumo podría alcanzar los 30.700 MW entre febrero y marzo. Esto superaría el récord histórico de 29.653 MW de febrero pasado. Se estima una probabilidad del 19% de que la generación local y las importaciones no sean suficientes para cubrir la demanda, especialmente en los grandes centros urbanos como Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza.
El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, afirmó, la falta de inversión en el mantenimiento de la red y la infraestructura generadora de energía en los últimos años aumentó el riesgo de colapsos. Aunque la reducción de subsidios y el aumento de tarifas ayudaron a mitigar el riesgo, no lo eliminaron por completo.
Medidas ante la crisis energética
Para enfrentar la crisis, la Secretaría de Energía trabaja en un "Programa de Emergencia Verano 2024-2025". Este incluye la importación de energía de Brasil y Paraguay, acuerdos con grandes consumidores para reducir su demanda y la instalación de generadores móviles. Cammesa tendrá un rol clave en la programación del despacho de energía, priorizando la disponibilidad en las horas de mayor exigencia.
El gobierno también contempla la posibilidad de nuevos aumentos tarifarios y la eliminación completa de subsidios para marzo de 2025. Además, se ofrecerán incentivos para que los usuarios reduzcan su consumo, como descuentos por disminuciones de al menos un 10% en comparación con el verano anterior, según expertos en eficiencia energética.
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