Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
En un acto de desafío directo al Gobierno argentino, se encontró el 11 de abril una manta con amenazas atribuidas a grupos narcotraficantes en la Avenida Circunvalación de Rosario. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, respondió con determinación a través de su cuenta de X, asegurando que el estado tomará medidas firmes: "Los vamos a meter presos a todos. Se les acabó la joda".
Así, el hallazgo se produjo después de que la Policía de Santa Fe recibiera una alerta al 911. En la manta, escrita con aerosol rojo y negro y plagada de errores ortográficos, se leía: "Patricia Burlich (sic) pusiste a todos los presos en un mismo pabellón ahora vamos a dejar negra Rosario y Baires". Este mensaje, firmado "Atte, los rosarinos", sugiere una represalia por recientes acciones del Gobierno destinadas a combatir el narcotráfico.
La situación se torna aún más grave considerando el contexto en el que se descubrieron las amenazas. La ministra Bullrich, junto con altos funcionarios de seguridad, había programado una conferencia de prensa para detallar un importante operativo que resultó en la detención de Julio Andrés Granthon, un peligroso narcotraficante, en el Penal de Ezeiza.
Este incidente ocurre poco después de que el Servicio Penitenciario Federal inaugurara dos pabellones remodelados en el Complejo Penitenciario I de Ezeiza. Estas instalaciones, con capacidad para 26 internos, están equipadas con cámaras de última generación para un monitoreo exhaustivo, como parte de un esfuerzo más amplio para sofocar las actividades mafiosas tanto dentro como fuera de las prisiones.
Desde el inicio de su gestión, Bullrich implementó el Operativo Bandera en Rosario, reforzando la presencia de fuerzas federales para prevenir y reprimir el crimen organizado. El aumento reciente en personal y el endurecimiento de las condiciones de detención para narcotraficantes son respuestas a una creciente ola de violencia mafiosa en la región.
La aparición de la narcomanta por parte de carteles para intimidar mediante mensajes públicos, pone en relieve la urgencia y la gravedad del problema del narcotráfico en Argentina. La respuesta de Bullrich, reflejada en su declaración, muestra la resolución del Gobierno de enfrentar estos desafíos con seriedad, buscando asegurar la seguridad y el orden público.
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