Ciudad de Buenos Aires,
Judith Moreno
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El turismo de compras ha tomado un nuevo rumbo para los argentinos, y Bolivia es uno de los destinos favoritos para quienes buscan precios más accesibles en comparación con el mercado local. En particular, ciudades fronterizas como Villazón, Yacuiba y Bermejo experimentaron un aumento en la llegada de compradores argentinos, atraídos por la posibilidad de adquirir productos de electrónica, indumentaria y repuestos automotrices a costos significativamente más bajos.
Ubicadas estratégicamente en la frontera con Argentina, estas localidades bolivianas desarrollaron una oferta comercial adaptada a la creciente demanda. Villazón, situada frente a La Quiaca (Jujuy), es uno de los puntos más concurridos por los compradores que cruzan a diario en busca de precios más convenientes. Yacuiba, vecina de Salvador Mazza (Salta), y Bermejo, cercana a Aguas Blancas (Salta), también han experimentado un notable incremento en el flujo de argentinos quienes llegan con el objetivo de ahorrar en sus compras.
Entre los artículos más demandados se encuentran los electrodomésticos y dispositivos electrónicos, como celulares, notebooks y televisores, que pueden costar hasta un 30% menos que en Argentina debido a una menor carga impositiva y un tipo de cambio favorable. También hay una fuerte demanda en ropa y calzado, con marcas internacionales y nacionales las cuales ofrecen precios competitivos.
Otro de los sectores que ganó protagonismo es el de los repuestos automotrices, especialmente neumáticos, cuyos precios en Bolivia son considerablemente más bajos. La perfumería y cosmética también atraen a los compradores argentinos, ya que muchas marcas importadas tienen costos más accesibles.
"En los últimos años, Bolivia ha emergido como un destino para los turistas interesados en hacer compras, con una amplia oferta de mercados tradicionales, productos artesanales y destinos únicos", señaló a Infobae Alejandro Festa, gerente de hospedajes y servicios turísticos de Despegar.
La facilidad de acceso a estas ciudades y la proximidad con provincias del norte argentino hacen que los viajes de compras a Bolivia sean una opción cada vez más común. Muchos compradores organizan visitas de un solo día para abastecerse de productos y regresar el mismo día, mientras que otros optan por pernoctar y aprovechar aún más los precios bajos.