Ciudad de Buenos Aires,
Axel Olivares
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicará el jueves 26 de septiembre los índices de pobreza e indigencia del primer semestre de 2024, los primeros meses bajo la administración de Javier Milei. Pero, antes de ser publicados los números, el Gobierno decidió adelantarse a las críticas asegurando que los datos que el INDEC presente son producto de "una de las peores herencias recibidas en la historia argentina".
Durante su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada, el vocero presidencial, Manuel Adorni, aseguró en la mañana del 26 de septiembre de 2024 que el dato que revelará el INDEC "es un número que seguramente va a volver a reflejar la cruda realidad sobre la que está atravesando la sociedad argentina". En este sentido, aseguró que también será consecuencia del "populismo que ha sometido a la Argentina a tantos años de desgracia y devastación". De acuerdo con Adorni, la herencia recibida "probablemente sea de las peores herencias recibidas en la historia argentina".
Adorni señaló que la inflación de diciembre de 2023, mes en el que asumió Javier Milei, fue de 25,5%, un número que "nos marca que estábamos entrando en una hiperinflación". Además, acusó al candidato peronista y exministro de Economía, Sergio Massa, de utilizar 13 puntos del PBI para imprimir dinero que "lo único que hicieron fue determinar un despilfarro que culminó en una inflación del 211% para el 2023".
Luego, hizo referencia a la hiperinflación sufrida en el país en 1989 con sus consecuencias económicas y sociales y utilizó este caso para indicar que "cuando de hiperinflación y de lo importante de haberla evitado, cuando uno toma esta referencia (…) la pobreza se hubiese llevado del 40% a cerca del 95%. Hubiésemos entrado en un mar de pobreza absoluto en la República Argentina si no se evitaba la hiperinflación".
Al continuar haciendo referencia a la hiperinflación de 1989, el vocero afirmó que "este número de pobreza que disparó la última hiperinflación conocida, recién el gobierno de Carlos Menem la pudo recomponer seis años después donde la pobreza llegó al 22% a principios de 1995. Además, desde que asumió tardó un año y medio en poder mostrar un mes con un solo dígito de inflación". A esto, sumó: "Un edificio se destruye en un segundo, si uno quisiese, y reconstruirlo tarda mucho más tiempo, y es lo que ha ocurrido en la Argentina".
Para evitar que se repita esta situación, afirmó Adorni, "se llevó adelante un plan para precisamente pulverizar la inflación y se logró bajar del 25% al 4% actual para hacer números redondos. Exactamente lo contrario de lo que se hizo en las últimas décadas". Destacó que esto "se hizo sin chamanismo económico, sin controles de precios, sin ley de góndolas, abrazando la ortodoxia que llevó a los países más prósperos del mundo a alcanzar el desarrollo".
A su vez, destacó que, paralelamente al plan de estabilización, el Gobierno acompañó a los sectores más vulnerables indicando que la Asignación Universal por Hijo se aumentó un 308% y la Tarjeta Alimentar un 138%, por lo que ahora cubre el 86% de la canasta básica. En esta misma línea, Adorni aseguró que "se eliminaron los intermediarios en virtud de ayudar a los más vulnerables para que ningún amigo de la política se quede con un solo peso de nadie, menos aun de los pobres o de la gente que más le cuesta comer todos los días".
Frente a los posibles cuestionamientos de la oposición cuando se presentes los datos del INDEC, Adorni afirmó que "es triste que cada vez que recibimos los datos de pobreza, uno tenga que nuevamente recordar todo el daño que le han hecho a la Argentina y lo que nos han dejado". El segundo semestre de 2023, la pobreza alcanzó el 41,7% y la indigencia, el 11,9%. De acuerdo con estimaciones del Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la Universidad Católica Argentina, el cual usa una metodología diferente al INDEC, la pobreza alcanzaría el 52% y la indigencia llegaría al 17,9% en el periodo más reciente.