Maestros y personal educativo también son víctimas de bullying por parte de alumnos

Amenazas a profesores y personal educativo atenta contra su integridad, afirma estudio

Casi la mitad de los trabajadores educativos tienen la intención de renunciar o cambiar de empleo tras ser víctimas de algún tipo de violencia por alumnos

El bullying o acoso escolar es un tipo de maltrato psicológico o físico entre estudiantes que atenta contra su integridad. Sin embargo, recientemente se ha detectado que el acoso escolar también lo sufren maestros y personal educativo.

Un estudio realizado por la Asociación Americana de Psicología (APA), indicó que un 50 por ciento del personal educativo en Estados Unidos estuvo dispuesto a renunciar o ser transferido a otra escuela. Esto debido a que al menos experimentaron una vez acoso verbal, amenaza de violencia por parte de los estudiantes y en algunos casos, padres de familia.

La situación se convirtió aún más crítica a raíz de la pandemia por Covid-19, pues maestros, escuelas y personal educativo tuvo que adaptarse a una nueva realidad. Ello trajo consigo problemas como el control de grupos, la casi nula atención de los alumnos y el acoso a través de plataformas digitales y redes sociales.

Susan Dvorak McMahon, especialista de la Universidad DePaul y coautora del estudio, indicó que se deben tomar medidas urgentes para mitigar la situación de acoso escolar. "Es responsabilidad de todos comprender las preocupaciones de seguridad escolar y la mejor manera de abordarlas para crear un entorno efectivo y seguro para, estudiantes, maestros y personal".

De acuerdo con el informe técnico, la organización encuestó a 14 mil 966 participantes, entre ellos, 9 mil 370 maestros, 860 administradores, mil 499 psicólogos escolares y trabajadores sociales. El estudio estuvo enfocado en instituciones educativas públicas de Estados Unidos y Puerto Rico, pero los datos duros más reveladores estuvieron en las escuelas estadounidenses.

Las preguntas de la encuesta estuvieron enfocadas en temas de amenazas de violencia, por ejemplo: Acoso verbal, acoso cibernético e, incluso, agresiones físicas. También se incluyeron preguntas sobre su intención de renunciar, jubilarse anticipadamente o transferirse a otro puesto y preguntas abiertas enfocadas en el ambiente laboral o recomendaciones generales para mejorar las escuelas.

Por otra parte, según los resultados, el 33% del total de los maestros encuestados reportaron al menos un incidente de acoso verbal o comportamiento amenazante de algún estudiante. El 14% de los maestros indicó que fueron víctima de agresión física por parte de un estudiante y el 18% del personal educativo como psicólogos o trabajadores sociales sufrieron un incidente violento.

Cabe señalar, las cifras más altas las registraron los administradores escolares; aproximadamente, el 37% fue víctima de un incidente de acoso o amenaza de violencia por parte de un estudiante. En tanto, el 42% del personal administrativo informó que también recibió amenazas y/o agresiones físicas por parte de un padre de familia.

Para McMahon, las agresiones por estudiantes son comunes porque no hay consecuencias y no existe autoridad la cual pueda detenerlos. "La violencia contra los educadores es un problema de salud pública y necesitamos soluciones integrales basadas en la investigación", subrayó.

Según los especialistas, la violencia física y verbal dirigida contra el personal escolar puede estar exacerbando los informes de alto estrés, traslados y abandono de la profesión. Por tal motivo, McMahon detalló una estrategia para encontrar una solución rápida y efectiva ante la problemática de violencia escolar.

Es importante apoyar la salud mental de todos los trabajadores escolares, así como promover prácticas informativas sobre las consecuencias. Mejorar el funcionamiento organizacional de las instituciones educativas a través de la inclusión.

Aunado a ello, proporcionar capacitación sistémica basada en la investigación para prevenir la violencia escolar y reducir el uso de políticas de tolerancia cero en respuesta a un comportamiento preocupante. Ello con la intención de ayudar a comprender y abordar de mejor manera las necesidades socioemocionales no solo en estudiant