Tras intentar anular las elecciones presidenciales, el partido de Bolsonaro recibió una multa de 4.2 millones de dólares por el 'INE brasileño' por mala fe
El Tribunal Superior Electoral de Brasil (STE, por sus siglas en portugués) multó al Partido Liberal (PL) de Jair Bolsonaro por 4.2 millones de dólares. La multa se presenta después de haber rechazado la demanda interpuesta por el partido, el cual buscaba anular los resultados de las elecciones presidenciales.
Alexandre de Moraes, presidente del STE, consideró que la denuncia presentada el martes por el grupo político era de "mala fe". El fallo señaló que hubo falta de pruebas y circunstancias para establecer una verificación extraordinaria de unas 280 mil urnas electrónicas usadas en el balotaje presidencial.
De acuerdo con PL, los votos en las urnas electrónicas debían de ser invalidadas porque fueron "comprobadas disconformidades irreparables de funcionamiento" en las urnas. Las consecuencias se ven reflejadas en la segunda vuelta de las elecciones, aseguró la agrupación política.
Moraes consideró que los argumentos presentados eran totalmente falsos y que el pedido era ofensivo al Estado Democrático de Derecho. El propósito del PL, según el presidente del tribunal, es alentar movimientos delictivos y antidemocráticos.
En consecuencia, Moraes determinó que se convocara a la Corregidora General Electoral para concluir la responsabilidad en un posible desvío del propósito en el uso de la estructura partidaria. Además, se planteó la posibilidad de la comisión de delitos comunes y electores para perturbar la democracia brasileña.
Igualmente, el presidente del STE, bloqueó el fondo partidario del grupo político de Bolsonaro hasta que la multa quede pagada. Actualmente, son 269 millones de reales en fondos del partido que este tiene.
La multa se dio luego de que el PL enviara el miércoles 23 de noviembre un documento a la Corte donde no presentaba el análisis de los equipos usados en la primera vuelta de votación. Después de haber interpuesto la acción, Moraes dio 24 horas al partido para presentar una auditoria donde se abarcaran las dos vueltas de la contienda electoral.