Lo que debes saber del pink tax

Un impuesto destinado a las mujeres en productos de higiene

Estrategia de marketing o abuso al consumidor, el impuesto en el uso de colores "de género" que obliga a las mujeres a pagar más por productos de higiene

Entre el rosa y el azul existen estereotipos de género con valor monetario. Su nombre en inglés es "pink tax", su traducción al español es impuesto rosa y es a grandes rasgos, un factor que recauda millones de pesos en el uso de colores o detalles "femininos" para diferenciar los productos de higiene personal de los destinados a hombres, incluso cuando los dos cumplen la misma funcionalidad.

¿Qué es el pink tax? La Biblioteca del Congreso Nacional de Chile (BNC), asegura que el término no es como tal un impuesto, sino un sobreprecio aplicado por estrategias de mercado debido a la estrecha vinculación entre la figura femenina y el hogar. En consecuencia, seres más activos en el mercado como las mujeres son el target ideal para aplicar estrategias de consumo.

Parte de la definición de la BCN marca una relación actual en el territorio nacional. Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) las mujeres representan el 70% de las decisiones de compra a nivel mundial y en México esta cifra mantiene una estrecha relación con el promedio de mujeres laborando: 45% de la población en comparación con el 78 por ciento de los hombres activos en el sector laboral, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) de 2018.

Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en su informe, La Lucha por la Igualdad de Género de 2018, las profesionistas aún enfrentan una clara desventaja con un ingreso anual promedio 54.5% más bajo en comparación con los hombres en México. Un año antes, en 2017, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), en el estudio Discriminación Estructural y Desigualdad Social mostró, en México el género masculino recibe en promedio 34.2 por ciento más ingreso por hora laborada. Aunque el informe aclara las variaciones por sector y estado, la brecha salarial aún persiste como una realidad a la que millones de mujeres se enfrentan al momento realizar las compras.

Pero, ¿qué productos mantienen más impuestos? Algunos de los productos con mayor impuesto son los de cuidado personal e higiene. Con ligeros cambios en presentación y colores y con la misma funcionalidad, los rastrillos, por ejemplo, son 10 por ciento más caros en comparación con las presentaciones en azul. En el caso de ropa interior desechable existe una diferencia del 12 o el 13 por ciento de diferencia en precios dirigidos a hombres y mujeres. Con un salario en promedio menor al de los hombres, el mercado femenino realiza compras con impuestos justificados en las presentaciones de productos basadas en constructos sociales de género.

Otro sector con diferencia de costos son los servicios y productos financieros. En el caso de los seguros de vida, la banca basa sus presupuestos en el supuesto de que las mujeres resultan más longevas a comparación de los hombres y la tendencia a desarrollar más enfermedades que el género masculino.

En un ejercicio realizado por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financiero(CONDUSEF) se compararon los seguros de gastos médicos individuales con cobertura básica entre un hombre y un mujer, ambos con 30 años, mismo deducible y misma suma asegurada. Mientras que en BBVA Seguros, la prima neta anual por 50 millones asegurados es de 11 mil 392 pesos para el hombre, en el caso de la mujer por la misma cifra asegurada es de 14 mil 320 pesos.

Aunque la ley no permite a la Profeco sancionar estas prácticas, sí pretende evidenciarlas informando a los consumidores y alentando al mercado por productos neutros sin distinciones basadas en los estereotipos de género cuando la funcionalidad es la misma. Otra recomendación es simplemente optar por las versiones "masculinas", y comparar precios en línea. Si bien todavía no existe una regulación y sanción a estas prácticas, formar a compradores inteligentes que castiguen