Ayahuasca: ¿Cuáles son las experiencias más comunes entre consumidores?

Sin importar el contexto social o cultural, las personas que beben ayahuasca informaron experiencias similares

Desde jaguares hasta ciudades futuristas, las visiones de ayahuasca tienen un impacto en la vida de sus consumidores, pero poco se sabe de cómo se producen

La ayahuasca es una mezcla de dos plantas, la enredadera de ayahuasca y del arbusto chacruna, el cual contiene el alucinógeno dimetiltriptamina (DMT). Las visiones producidas por la ayahuasca pueden cambiar la vida de quien lo consume, sin embargo poco se sabe sobre cómo o por qué suceden.

Independientemente del contexto social o cultural de las personas que beben ayahuasca, la mayoría informa experiencias similares. Muchas de las visiones relatadas van desde escenas de junglas, poblados de jaguares y visiones de palacios ornamentados.

Al beber la infusión, se crea una atmósfera psicológica particular, que es donde suceden las visiones. Las experiencias visuales pueden ocurrir con los ojos abiertos o cerrados. Éstas experiencias inician con las típicas imágenes psicodélicas, por ejemplo, colores más vivos y patrones geométricos. Otros psicodélicos también provocan alucinaciones, pero, las visiones de la ayahuasca se sienten reales. Pero, cuando hay una alta dosis de DMT, las personas refieren visiones de naves espaciales y ciudades futuristas,

Los animales que se ven son aleatorios, sin embargo hay un patrón constante de cuáles se ven con más frecuencia. Serpientes, como las anacondas, y los grandes felinos, como los jaguares, suelen estar presentes en las visiones. Sin embargo, algunos llegan a ver insectos y otras criaturas, por ejemplo, delfines, pero otros llegan a observar dragones y otras criaturas mitológicas. Una entidad discutida entre los bebedores de ayahuasca es la Madre Ayahuasca, la cual es una presencia femenina quien encarna toda la experiencia.

Algunos dicen ver una figura humanoide y otros interpretan el sentimiento de la experiencia como Madre Ayahuasca. Según el chamán de Perú, Wiler Noriega Rodríguez, cuando se beben las plantas se produce una conexión con la naturaleza a través de sus espíritus. Y dichos espíritus guían a las personas por el mundo y son quienes ofrecen enseñanzas.

Finalmente, las tradiciones indígenas interpretan estas visiones como originarias de la naturaleza, pero desde la perspectiva científica son alucinaciones creadas por el cerebro. Sin embargo, para quienes han vivido la experiencia, el aspecto científico es poco creíble, pues su experiencia con la planta les parece autónoma e incluso poseedora de inteligencia propia.