Ante un posible desalojo, vecinos y comerciantes del Paradero Metro Universidad protestan fuera de las oficinas del Metro de CDMX en Av. del Taller para exigir transparencia
Los Comerciantes Unidos del Paradero Metro Universidad protestaron frente a las oficinas del Metro de la Ciudad de México de Avenida del Taller. Esto debido a la situación de desalojo que podrían padecer los trabajadores ante la construcción de la terminal de la línea 4 del Cablebús.
Autoridades del Gobierno de la Ciudad de México amenazaron con desalojar a los comerciantes que trabajan en el CETRAM del Metro Universidad el 27 de mayo sin aviso oficial y con uso de maquinaria. En testimonios compartidos con NotiPress, los comerciantes denunciaron la vulneración de sus derechos, y exigieron una audiencia con la jefa de gobierno Clara Brugada.
Ni los vecinos ni los locatarios se oponen a la construcción del Cablebús, pero exigen transparencia para asegurar sus actividades diarias. Más de mil familias dependen directa o indirectamente de las actividades económicas llevadas a cabo en el CETRAM Universidad, contó Víctor "N" en entrevista para NotiPress.
Tanto Víctor como Felicitas, ambos adultos mayores, se han desempeñado como vendedores desde los inicios de la construcción del Metro Universidad. Según contaron a la agencia de noticias, posterior a la construcción del CETRAM, el Gobierno del entonces Distrito Federal los reubicó. Ellos mismos construyeron sus puestos de lámina, ayudaron a pavimentar las calles y han tenido una buena relación con las autoridades del Metro de la ciudad.
Marisol, de 16 años, es hija de vendedores del Paradero de Metro Universidad, sus recuerdos y los de sus hermanos mayores inician en ese CETRAM. "Tengo una sensación de miedo constante en cuanto me enteré de los rumores de desalojo", aseguró. "Toda mi familia depende de los ingresos del Paradero, ahora con el desalojo sería como empezar desde cero, mis papás tienen más de 55 años".
El 26 de mayo, los Comerciantes Unidos del Paradero Metro Universidad presentaron una queja formal ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Hasta el momento, no se entregó ningún documento oficial que justifique el desalojo ni se ofreció un plan formal de reubicación. Verbalmente, se sugirió una relocalización en otro andén del CETRAM, opción que los locatarios consideran inviable por falta de espacio y claridad en los términos. Los comerciantes demandan ser incluidos en la planeación del proyecto, en el que consideran podrían contribuir positivamente si se respetan sus derechos y antigüedad.