Estudio global revela que la IA ayudará a gobiernos a reducir fraudes y recuperar confianza ciudadana mediante mayor eficiencia y transparencia
Frente al aumento de fraudes impulsados por inteligencia artificial (IA), gobiernos de distintas regiones del mundo se preparan para intensificar su inversión en tecnologías que refuercen la integridad institucional. Estos delitos no solo representan pérdidas millonarias para los presupuestos públicos, sino también una amenaza directa a la confianza ciudadana.
El estudio global "Confianza y transparencia: combatir el fraude para maximizar la eficiencia de los programas públicos", elaborado por Coleman Parkes en colaboración con SAS, consultó a 1,100 funcionarios públicos de nivel medio y alto. El 70% de los encuestados afirmó que sus agencias fueron víctimas de fraudes habilitados por IA, y reportó un aumento sostenido de estos ataques en los últimos cinco años. Entre las técnicas más frecuentes destacan identidades sintéticas, phishing personalizado y software malicioso que evade mecanismos de detección.
Según datos compartidos con NotiPress, el 96% de los funcionarios reconoció que estos delitos afectaron negativamente la percepción pública de las instituciones. Las herramientas utilizadas por los estafadores imitan patrones humanos, falsifican documentos y operan en tiempo real, lo cual dificulta su contención mediante métodos tradicionales.
"La transformación digital en el sector público es un proceso relevante a nivel internacional. México cuenta con potencial para realizar esta transformación", señaló Mario Ulloa, líder de Sector Público para Latinoamérica en SAS. También agregó que "la clave está en rediseñar las estructuras organizacionales y fomentar la confianza en las nuevas tecnologías".
El estudio estima que frenar eficazmente el fraude permitiría recuperar hasta el 16% del presupuesto gubernamental. Además, el uso de inteligencia artificial aplicada a procesos fiscales podría aumentar la recaudación entre un 3% y un 5%. "La transparencia en dichos procesos contribuye a fortalecer la confianza ciudadana respecto al uso adecuado de los fondos públicos", puntualiza Ulloa.
Pese a estas cifras, solo el 10% de las agencias gubernamentales cuenta con las herramientas necesarias para enfrentar esta problemática. Si bien el 85% considera que combatir el fraude es una de sus cinco prioridades, aún existen obstáculos importantes. Entre ellos, se identifican la falta de habilidades analíticas (48%), deficiencias tecnológicas (40%) y limitaciones presupuestales (24%).
Actualmente, cerca del 50% de las instituciones utiliza IA para combatir fraudes, desperdicio y abuso. Más del 25% incorporó IA generativa, y se espera que esta cifra crezca significativamente en los próximos dos años. Según el informe, el uso de análisis de redes para identificar fraudes se incrementará del 32% al 87%, y el 97% de las agencias planea integrar modelos de lenguaje, gemelos digitales y datos sintéticos.
El 57% de los encuestados destacó un aumento en la eficiencia del personal investigador como uno de los principales beneficios. Además, reportaron mejoras en la priorización de alertas y en la identificación rápida de incidentes. No obstante, persisten preocupaciones relacionadas con la privacidad y seguridad de los datos (48%), así como con el uso ético de la inteligencia artificial (43%).
"Para SAS, esto implica no solo ofrecer soluciones tecnológicas, sino también acompañar a los gobiernos con estrategias de implementación responsables, seguras y transparentes", puntualiza Ulloa. Estos temas formarán parte del debate en el evento SAS Innovate on Tour México, que se celebrará el 9 de septiembre en el Hotel Sheraton de la Ciudad de México.