La Celac sacó un borrador cuestionando la operación militar lanzada por Estados Unidos en el Caribe; aunque recibió un gran apoyo, muchos países lo rechazaron
Ante la presencia de fuerzas militares estadounidenses en el mar Caribe con el objetivo de combatir el narcotráfico circundante en la región, el presidente colombiano, Gustavo Petro, marcó su oposición desde el primer momento al operativo. Tal fue su rechazo que, como presidente pro tempore de la Comunidad de Estados Americanos y Caribeños (Celac), acogió a la organización en Colombia para dialogar acerca de la operación militar que días atrás bombardeo un barco venezolano que presuntamente transportaba drogas por el mar Caribe.
Petro compartió en sus redes sociales una declaración oficial avalada por la mayoría de los Estados miembros. Se puede leer en el borrador: "América Latina y el Caribe han sido proclamadas como Zona de Paz, compromiso adoptado por todos los Estados miembros y sustentado en principios como: proscripción de la amenaza o el uso de la fuerza, la solución pacífica de controversias, la promoción del diálogo y el multilateralismo, el respeto irrestricto a la soberanía e integridad territorial, la no injerencia en los asuntos internos de los Estados y el derecho inalienable de los pueblos a la autodeterminación".
El documento también hace referencia al despliegue de dos submarinos nucleares cerca de las costas de Venezuela. Al señalar al Tratado para la Proscripción de las Armas Nucleares en la América Latina y El Caribe (Tratado de Tlatelolco), el borrador afirma que "constituye un hito histórico que convirtió a nuestra región en la primera zona densamente poblada del mundo libre de este tipo de armamento".
Además, reafirma la postura de la Celac de combatir el narcotráfico en la región. En este sentido, subraya que esa lucha solo puede darse "aumentando la cooperación y la coordinación regional e internacional en el marco del respeto al Derecho Internacional y cumpliendo con los marcos legales y convenios internacionales vigentes".
Según indicó Petro en su cuenta de X, el documento no pudo convertirse en comunicado oficial de Celac "porque una minoría, que añado, se opuso". Los países que respaldaron el borrador fueron Antigua y Barbuda, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Dominica, Granada, Honduras, México, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y Las Granadinas, Surinam, Uruguay y Venezuela.
Aun así, esta lista ha sido objeto de reclamos. Si bien Petro aseguró que República Dominicana firmó el documento, el canciller de dicho país, Roberto Álvarez, afirmó que nunca se autorizó su firma. "El gobierno dominicano, con total respeto a los esfuerzos por encontrar un consenso, (...) nunca dio el consentimiento para la adhesión de su firma a este comunicado", afirmó Álvarez.
Los países que no acompañaron la iniciativa fueron Argentina, Bahamas, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guyana, Haití, Jamaica, Panamá, Paraguay, Perú y Trinidad y Tobago.
Uno de los países en explicar la razón de su rechazo al documento fue Guatemala que en un principio se encontraba en la lista de países afínes, pero luego, se retiró. A través del Ministerio de Relaciones Exteriores, afirmaron que no se respetaron las prácticas habituales para adoptar una medidas, así como tampoco se siguieron adecuadamente los métodos de trabajo ni los procedimientos establecidos. La Cancillería guatemalteca también indicó que se difundió el comunicado en redes sociales sin haber sido adoptado ni consensuado por los países miembros.