La Generación Z logra derrocar al primer ministro de Nepal

Gobierno levantó la prohibición a redes sociales tras días de enfrentamientos

El primer ministro de Nepal dimitió tras la muerte de 19 manifestantes en protestas por el bloqueo de redes sociales y denuncias de corrupción

El primer ministro de Nepal, Khadga Prasad Sharma Oli, presentó su renuncia tras una semana de intensas protestas en las que murieron 19 personas por la represión de las fuerzas de seguridad. La dimisión se formalizó el martes 9 de septiembre, luego de una de las jornadas más violentas registradas en el país, marcada por el uso de fuego real contra manifestantes que se oponían a la censura digital y denunciaban corrupción en el gobierno.

Oli expresó en su carta de renuncia: “He renunciado al cargo de primer ministro con efecto desde hoy... para dar pasos hacia una solución política y la resolución de los problemas”. Su salida ocurre en medio de un ambiente de tensión social, con toque de queda en múltiples ciudades y una creciente presión pública contra la clase política.

Las protestas, protagonizadas principalmente por jóvenes de entre 15 y 28 años, comenzaron tras la orden gubernamental de bloquear 26 plataformas digitales, incluyendo Facebook, X, YouTube e Instagram. Las autoridades argumentaron que estas no cumplían con el registro obligatorio ante la Autoridad de Telecomunicaciones. “Detengan la corrupción, no las redes sociales”, coreaban los manifestantes durante las movilizaciones.

El lunes 8 de septiembre, decenas de miles de personas rodearon el edificio del Parlamento en Katmandú. La policía respondió con gases lacrimógenos, cañones de agua y armas de fuego. Siete de los fallecidos fueron atendidos en el Centro Nacional de Traumatología por heridas de bala en la cabeza y el pecho. El doctor Badri Risa declaró: “Muchos de ellos se encuentran en estado grave y parecen haber recibido disparos en la cabeza y el pecho”.

Los disturbios se intensificaron el martes cuando manifestantes incendiaron las residencias de figuras políticas clave, incluyendo las de Sher Bahadur Deuba, líder del Congreso Nepalí; el presidente Ram Chandra Poudel; el ministro del Interior, Ramesh Lekhak; y Pushpa Kamal Dahal, líder maoísta. También fue incendiada una escuela privada propiedad de la ministra de Relaciones Exteriores, Arzu Deuba Rana.

Pese al toque de queda, miles de personas continuaron protestando. “Castiguen a los asesinos del Gobierno. Dejen de matar a los niños”, gritaban frente al Parlamento. “Estamos aquí para pedir que se haga justicia y que se derribe el régimen actual”, afirmó Narayan Acharya, uno de los manifestantes.

Como respuesta a la crisis, el gobierno anunció la creación de una comisión investigadora con un plazo de 15 días para presentar un informe, además del ofrecimiento de compensaciones a las familias de las víctimas y atención médica gratuita para los heridos. El ministro del Interior también presentó su renuncia en una reunión de emergencia del gabinete.

Organizaciones de derechos humanos criticaron duramente las medidas digitales del gobierno. Señalaron que el proyecto de ley para regular redes sociales representa una amenaza a la libertad de expresión. Ni Meta, ni Google, ni X respondieron a las solicitudes de comentarios. Solo TikTok, Viber y otras tres plataformas han completado el registro y pueden operar actualmente en el país.