José Jerí asume la presidencia de Perú tras la destitución de Dina Boluarte, en medio de denuncias y crisis política e institucional
José Jerí Oré juró como presidente de Perú la madrugada del 10 de octubre, tras la destitución de Dina Boluarte por decisión unánime del Congreso. El nuevo mandatario, quien hasta ese momento presidía el Parlamento, asume el cargo por sucesión constitucional y estará al frente del Ejecutivo hasta las elecciones programadas para abril de 2026.
"El mal que nos aqueja en este momento es la delincuencia. El principal enemigo está en las calles", declaró Jerí en su discurso tras jurar al cargo, en el que también se refirió a su administración como un "gobierno de transición".
Nacido en Lima, de 38 años, Jerí llega al cargo en un contexto de alta rotación presidencial: es el séptimo jefe de Estado en ocho años. Su ascenso ocurre mientras enfrenta cuestionamientos legales y políticos. En enero de 2025, la Fiscalía Suprema de Familia inició una investigación preliminar en su contra por presunta violación sexual ocurrida en diciembre de 2024, durante una reunión en la localidad de Canta.
El ahora presidente negó los hechos y expresó su disposición a colaborar. Mientras tanto, su partido, Somos Perú, suspendió su militancia. En agosto de 2025, la fiscalía archivó el caso, pero el juzgado impuso una medida de tratamiento psicológico, la cual habría desobedecido, generando una denuncia adicional, según reportó el diario La República.
En el plano legislativo, Jerí ha sido vinculado a posibles actos de enriquecimiento ilícito y corrupción, relacionados con su gestión en el comité de Presupuesto. Se le acusa de condicionar la inclusión de obras públicas en el presupuesto nacional a pagos económicos. Él ha negado las acusaciones y declaró que se someterá a las investigaciones correspondientes.
La salida de Boluarte fue impulsada tras un atentado contra la banda Agua Marina durante un evento en un recinto militar, en medio de un clima creciente de inseguridad. A esto se sumaron protestas por la aprobación de una ley que obliga a los jóvenes a cotizar en fondos privados de pensiones, en un país con más del 70% de empleo informal.
Alonso Segura Vasi, exministro de Economía, señaló que "hay un serio problema en el país cuando el Congreso puede en unas pocas horas tumbarse un Gobierno sin una argumentación constitucional".
A pesar de la crisis política, la economía peruana muestra signos de recuperación tras la recesión de 2023. Para 2025 se estima un crecimiento entre 3,1% y 3,5%, con una inflación anual cercana al 1,8%, una de las más bajas entre mercados emergentes, según analistas. El sector de la construcción y la producción de cobre impulsan la actividad económica, mientras el Banco Central ha reducido su tasa de interés de 7,75% a 5,75%.
No obstante, Segura advirtió que, con precios récord de materias primas, la economía "debería estar volando", pero solo muestra una recuperación limitada. "Todo este desbarajuste institucional nos hace daño en el mediano plazo como país", concluyó.