La baja recaudación fiscal complica pandemia por Covid-19 en México

Urge un replanteamiento en materia fiscal ante la crisis sanitaria y económica de covid-19

Por lo evidenciado durante la pandemia de covid-19, es urgente aumentar las aportaciones del sistema fiscal mexicano para hacer frente a crisis similares

Arturo Herrera, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), anunció que la dependencia a su cargo aplicaría estímulos a manera de "colchón económico" para disminuir impacto sobre la economía mexicana originada por el COVID-19. Durante la inauguración de la 83º Convención Bancaria, reconoció el duro impacto que tendrá la economía por el virus y urgiendo el replanteamiento de una reforma fiscal.

El gobierno está adoptando un enfoque de "esperar y ver", pese a los escasos recursos disponibles, para decidir la mejor opción para hacer frente a los efectos económicos del coronavirus. Sin embargo, a medida que los gobiernos toman diferentes medidas en favor de contener el COVID-19, los empleadores globales también demandan apoyos que hagan posible sobrellevar la crisis y las consecuencias económicas originadas la pandemia, hacen evidentes diversas dificultades del sistema fiscal mexicano.

Un ejemplo de estos apoyos es la petición de la suspensión temporal de pagos provisionales de impuesto sobre la renta, para aminorar el impacto en las empresas en temas de liquidez por la expansión del coronavirus y la inminente caída en la economía.

Ante la expansión del coronavirus y su manifiesto impacto humanitario y económico en el mundo, se presentan una serie de problemas fiscales no calculados que vale la pena considerar, dada la rápida expansión tanto en los mercados de capitales como en las diferentes cadenas de suministro globales y la puesta en evidencia de una serie de problemas para el fisco.

Para el caso mexicano, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) en su estudio económico en 2019, advirtió de estas necesidades. Recomendó a la entonces entrante administración, la aplicación de una reforma fiscal que eleve los ingresos tributarios para invertirlos en infraestructura y gasto social como ahora se hace urgente.

En su momento, la OCDE reconoció el esfuerzo de la reforma fiscal de 2014 durante la administración de Enrique Peña Nieto, pero hizo la tajante acotación de que México continúa siendo uno de los países que menos recauda en América Latina, pese a los esfuerzos realizados.

Así, ante la crisis sanitaria y la necesidad urgente de mejorar el sistema de salud para afrontar pandemias como esta, urge realizar reforma fiscal para sanear las cuentas del Estado. Por lo evidenciado durante la crisis por COVID-19, es urgente aumentar las aportaciones de los contribuyentes para poder cumplir con las obligaciones de un gobier