Bogotá,
Axel Olivares
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
Durante la semana reciente de sesiones ordinarias en el Congreso, uno de los temas a tratar era la reforma laboral presentada por el Gobierno nacional. En este sentido, la iniciativa se aprobó en el primer debate. A pesar de que aún faltan tres debates más, el primer paso que dio la reforma no quedó exento de críticas.
Luego de la aprobación del proyecto por parte de la Comisión Séptima, el presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), Jaime Alberto Cabal, afirmó que el texto de la ley manifiesta el desconocimiento de la situación del país por parte de un grupo de congresistas que, según Cabal, le dan la espalda a la realidad y solo piensan en sus intereses particulares.
Cabal afirmó que "lamentablemente en este debate se aprobaron los artículos propuestos por el Gobierno que aumentarían sensiblemente los costos para el sector empresarial, como consecuencia de horas extras, dominicales y festivos, jornada diurna, vacaciones para el sector de vigilancia y laboralización del contrato de aprendizaje; temas que dejan por fuera a los 2.7 millones de colombianos que hoy no tienen un trabajo".
El gremio asegura que la aprobación de la reforma llevaría a Colombia a una catástrofe económica. Entre los aspectos de la ley a los cuales se oponen, mencionan el proceso para convertir el contrato de aprendizaje en un contrato laboral. Según lo acordado en el primer debate, el sector productivo tendrá que pagar, como mínimo cinco billones doscientos mil millones de pesos adicionales, y sin contar con el aumento exponencial de aprendices por el acuerdo 10 del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).
Por último, el presidente de Fenalco destacó las partes que se rechazaron de la reforma, lo cual constituye un logro para quienes, según el presidente del gremio, creen en el crecimiento económico. Esto implica generar empleo de calidad y reducir la informalidad. Entre los puntos que se descartaron en el debate, Fenalco celebró la eliminación de: la formación de megasindicatos, la posibilidad de que los sindicatos invirtieran recursos en campañas políticas y en otros fines, la posibilidad de citar a huelga por razones de solidaridad o políticas, el cambio de la carga de la prueba cuando hubiera despido sin justa causa y la prohibición de los contratos de prestación de servicios, entre otros.
No obstante, Cabal insiste en que la reforma laboral no siga el sendero que el Gobierno de Gustavo Petro marcó al momento de promulgarla. "Desde Fenalco de nuevo hacemos un llamado a los congresistas de Cámara y Senado para que hagan un debate serio y voten sensatamente, de acuerdo con lo que le conviene al país", concluyó.