Foto: X @DelegacionEln
Tras siete días de reuniones en Caracas, Venezuela, las delegaciones del Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) concluyeron una nueva fase de diálogos encaminada a reactivar el proceso de paz. Ambas partes acordaron un próximo encuentro en enero del 2025, en un lugar aún por definir, para evaluar el desarrollo de los acuerdos, analizar la continuidad del cese al fuego y fortalecer la participación de la sociedad en el proceso.
Las delegaciones subrayaron la importancia de introducir correctivos que eviten incumplimientos y de adoptar mecanismos para consolidar los avances de la Agenda de Acuerdo de México, eje central de las negociaciones. En un comunicado conjunto, destacaron que la prioridad es atender el clamor de las comunidades para avanzar con mayor celeridad, sin comprometer la solidez del proceso.
Aseguraron que el cansancio de la violencia y el clamor para que estos diálogos avancen con eficacia son evidentes. Sin embargo, señalaron: "esa imperiosa necesidad no debe llevarnos a ceder a la tentación de producir resultados a toda costa".
Los avances más relevantes en el proceso se dieron en Cuba durante el tercer ciclo, con el anuncio del cese al fuego bilateral más prolongado hasta ahora, que inició el 3 de agosto de 2023 y tuvo una duración inicial de seis meses, posteriormente extendidos otros seis. Sin embargo, el cese finalizó en agosto de este año sin un acuerdo de renovación, marcando un retroceso que ambas partes buscan superar en las próximas rondas.
Desde el inicio de las negociaciones hace dos años, se realizaron seis ciclos de diálogo en Caracas, Ciudad de México y La Habana. Durante este tiempo, las partes firmaron 27 acuerdos y estructuraron la Agenda de México, logros que la delegación del Gobierno calificó como "un acumulado nunca antes alcanzado en la historia de las conversaciones con esta organización armada rebelde".
Pese a los avances, las delegaciones reconocieron que el conflicto armado sigue afectando a las comunidades, cobrando vidas de soldados y guerrilleros, y perpetuando condiciones de precariedad en los territorios. "Han sido logros en medio de grandes dificultades", reconoció la delegación del Ejecutivo, enfatizando que el proceso de paz enfrenta desafíos significativos.
El próximo encuentro en enero también se enfocará en evaluar los resultados alcanzados y en construir un balance entre las transformaciones estructurales necesarias y las demandas inmediatas de las comunidades. Las delegaciones reafirmaron su voluntad de persistir en la construcción de "el acuerdo más completo y desarrollado posible que permita el camino de la transición a la paz con el ELN".
Finalmente, hicieron un llamado a todas las fuerzas sociales, económicas y políticas del país a sumarse activamente al proceso, destacando que su participación es fundamental para alcanzar una paz duradera. Los próximos meses podrían ser decisivos para establecer la continuidad del cese al fuego y garantizar el cumplimiento de los acuerdos en los territorios más afectados.
DESCARGA LA NOTA SÍGUENOS EN GOOGLE NEWS