
Foto: DANE
La inflación anual en Colombia cerró el mes de septiembre de 2025 con una variación de 5,1%, según datos publicados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane). Esta cifra representa una reducción de 0,6 puntos porcentuales en comparación con el mismo periodo de 2024, cuando el Índice de Precios al Consumidor (IPC) alcanzaba el 5,8%.
En rueda de prensa realizada el 8 de octubre en Bogotá, la directora del Dane, Piedad Urdinola, indicó que "en la serie larga, vemos cómo desde finales del 2024 hasta este momento la inflación se ha mantenido ya en una tendencia bastante estable, después de esos grandes crecimientos y decrecimientos que sufrimos luego de la terrible pandemia".
La funcionaria también destacó que la última vez que la inflación anual estuvo por encima del nivel actual fue en febrero de 2025, cuando alcanzó el 5,2%. Con el dato de septiembre, se mantiene la tendencia descendente observada desde comienzos de año y el escenario continúa condicionado por la inflación,
De manera paralela, el Dane informó que la variación mensual del IPC fue de 0,3% para septiembre, lo cual se suma al comportamiento moderado que ha caracterizado los precios al consumidor durante el año en curso.
Por su parte, el Ministerio de Hacienda señaló que la inflación acumulada en lo que va de 2025 fue de 4,5%, cifra también inferior al mismo acumulado de 2024. De acuerdo con la entidad, esto evidencia una "moderación en los precios", lo que representa un alivio para consumidores y sectores económicos sensibles a la variación de costos.
El IPC es el principal indicador de seguimiento al comportamiento general de los precios en la economía colombiana. Su reducción ha sido atribuida a una combinación de factores, incluyendo estabilidad en los precios de los alimentos, menor presión en los precios de la energía y ajustes graduales en la política monetaria del Banco de la República frente a la depreciación del peso.
Aunque los resultados son positivos, en medios económicos han advertido que la estabilización inflacionaria aún está sujeta a riesgos externos, como variaciones en los precios del petróleo, condiciones climáticas adversas o tensiones internacionales que puedan impactar la cadena de suministro global.
Los resultados de septiembre refuerzan las proyecciones de entidades financieras que prevén una inflación convergente hacia el objetivo del Banco de la República, fijado en un rango de 3% ±1. Sin embargo, las autoridades no han anunciado modificaciones inmediatas en política monetaria.
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