Ciudad de México,
Ali Figueroa
Crédito foto: Sergio Cara (NotiPress)
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), a través de su Análisis Económico Ejecutivo, con acceso para el equipo de NotiPress, advirtió que aún no hay evidencia sobre una adecuada recuperación económica en México. Esto debido al agravamiento de los contagios de Covid-19, falta de certidumbre en el mercado y poca confianza en la inversión, así como la presencia de rebotes en los indicadores económicos.
Según el CEESP, la economía registrará una caída significativa, cuyos alcances no se habían observado desde la recesión en 1932. Asimismo, el panorama de recuperación prevé un rebote en los principales indicadores económicos, aunque estos presentan comportamientos menos catastróficos que los registrados durante el confinamiento sanitario y transición a la nueva normalidad.
Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), a través del Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) informó que el indicador global de la actividad económica bajó 6.2% en octubre, 0.8 puntos menos que en septiembre. Debido a ello, el sector privado anticipó una caída total de 9.0% al cierre de 2020.
Si bien la expectativa para finales de año indica una caída del Producto Interno Bruto (PIB) inferior a la planteada anteriormente, por debajo del 10%, la recuperación económica se encuentra lejos de ser una realidad en 2021. Esto se debe a que el deterioro del mercado laboral y calidad del empleo incrementó durante septiembre, motivo por el que los ingresos de la mayoría de los hogares se ha reducido considerablemente.
Ante las modificaciones en el panorama económico, el consenso del sector privado apunta a una mayor preocupación debido a la contingencia sanitaria. Actualmente, las cifras de contagios superan el millón de personas y los decesos oficiales podrían rebasar los 100 mil casos, principalmente por los efectos sobre el desempleo.
Con respecto al empleo, los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), elaborada por el INEGI, presenta un escenario complicado en el tercer trimestre del año. La población ocupada disminuyó de manera significativa, en 4.3 millones, mientras el número de personas con trabajo se redujo en 5.9 millones entre los últimos dos trimestres. Esto indica un problema de precarización del empleo que debe ser atendida, opinó el CEESP.
"Todo indica que la velocidad con que se espera la recuperación es reducida. Más aún, este escenario está sujeto al riesgo implicado por un posible rebote de la epidemia a nivel local, sobre lo cual ya existen indicios. De materializarse, las expectativas se deteriorarían nuevamente y la caída de la economía en este año podría ubicarse en una cifra de dos dígitos", concluyó el análisis del CEESP con respecto a la amenaza por Covid-19 en materia de salud pública, empleo, cadenas de suministros, y consumo. De igual manera, definió cuestionables y optimistas las expectativas de crecimiento y recuperación oficiales planteadas por el gobierno.