Ciudad de México,
Axel Olivares
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress)
La digitalización financiera en México experimentó un crecimiento acelerado en los últimos años, pero aún enfrenta barreras significativas, especialmente en sectores menos bancarizados. Para romper con la preferencia por el efectivo y fomentar el uso de pagos digitales, diversos expertos señalaron durante el STP Summit 2024, al cual NotiPress tuvo acceso, que los incentivos fiscales y las campañas de educación financiera podrían ser clave. Estos elementos no solo facilitarían el acceso, sino que también ayudarían a construir la confianza de los usuarios en las plataformas de tecnología financiera (fintech).
Uno de los principales obstáculos para la adopción de pagos digitales en México es la falta de confianza en las fintech y en los servicios digitales en general. Según Carlos Millán de KPMG, el reto cultural y la predilección por el efectivo, especialmente entre las pequeñas y medianas empresas, limitan la adopción de estos métodos.
Además, muchos comercios temen que los pagos digitales los expongan a mayores fiscalizaciones, lo que incrementa su resistencia a integrarse al sistema formal. A este respecto, Millán sugiere que el gobierno podría implementar políticas de incentivos que apoyen a las empresas en su transición, destacando la experiencia de Brasil, donde el uso de pagos digitales fue incentivado a través de beneficios fiscales y promociones en el sistema de Pix.
Carlos Millán, socio de Global Strategy de KPMG en la STP Summit 2024 (Crédito: Sergio Cara/NotiPress)
Por otro lado, la regulación también juega un papel determinante en el impulso de los pagos digitales. Felipe Vallejo, de Bitso, plantea que, si bien la tecnología avanza rápidamente, la falta de un entorno regulatorio favorable limita el crecimiento. Sugiere que una revisión de las leyes fintech, incluyendo el acceso a sistemas de pago como el SPEI, podría reducir barreras para las fintech y ayudar a que más personas adopten estos servicios.
Asimismo, la educación financiera emerge como un factor crucial para construir la confianza de los usuarios en los servicios digitales. Juan José Villaseñor, de Stori, señala que es esencial acompañar a los clientes en el uso de productos financieros, explicando su funcionamiento y beneficios.
El tema de experiencia de usuario para nosotros es también importante. Conocer qué necesitan para nosotros ver qué tenemos que construir y realmente ofertar algo que añada valor a los usuarios", subraya.Asimismo, la educación financiera no solo debe enfocarse en cómo utilizar los productos, sino en evidenciar sus beneficios económicos, como el aumento en ventas al aceptar pagos digitales o la seguridad de reducir el uso de efectivo.
Para concluir, los expertos coinciden en que México necesita una combinación de incentivos fiscales, políticas públicas claras y una estrategia de educación financiera robusta para facilitar la transición a la economía digital. Estas acciones no solo apoyarían el desarrollo de una cultura de confianza en las fintech, sino que también permitirían a México posicionarse como un líder en inclusión financiera en la región.