Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
El peso mexicano continúa enfrentando presión frente al dólar estadounidense, a pesar de una desaceleración inesperada en los datos de inflación de diciembre en México. Durante la jornada del jueves, el tipo de cambio USD/MXN registró un aumento del 0.25%, reflejando un entorno de incertidumbre tanto a nivel local como internacional, según el análisis de Quásar Elizundia, estratega de investigación de Pepperstone.
El dólar ha mostrado un fortalecimiento sostenido gracias al buen desempeño de la economía de Estados Unidos. Indicadores clave como las vacantes laborales y el Índice de Gerentes de Compras (PMI) no manufacturero han superado expectativas, reduciendo la probabilidad de recortes agresivos en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed). Además, las expectativas sobre las políticas económicas de la administración Trump, especialmente en comercio e inflación, han añadido tensiones adicionales al mercado cambiario.
En contraste, la economía mexicana ha mostrado señales de fragilidad. El índice de confianza del consumidor, divulgado al inicio de la semana, quedó por debajo de las expectativas, reflejando una mayor cautela por parte de los hogares. Asimismo, aunque la inflación anual de diciembre se situó en 4.21%, ligeramente por encima del rango objetivo del Banco de México (Banxico), el dato fue menor a lo anticipado, generando especulaciones sobre un posible recorte en la tasa de interés en la próxima reunión de febrero.
El actual panorama, con una Fed menos propensa a flexibilizar su política monetaria y un Banxico que podría optar por un recorte de 50 puntos base, plantea un desafío para el peso mexicano. "La combinación de una Fed menos flexible, la incertidumbre en torno a las políticas de Trump y la posibilidad de un recorte de tasas más agresivo por parte del Banxico configuran un escenario desafiante para el peso mexicano en el corto plazo", explicó Elizundia.
En los próximos días, eventos como la toma de posesión de la nueva administración estadounidense y la publicación de los datos de empleo no agrícola (NFP) en Estados Unidos, previstos en 150 mil nuevos empleos, podrían ejercer mayor presión sobre el peso. Si el mercado laboral estadounidense supera las expectativas, el dólar podría continuar fortaleciéndose, agravando la depreciación del peso mexicano.
DESCARGA LA NOTA SÍGUENOS EN GOOGLE NEWS