Ciudad de México,
Emiliano Fuentes
Crédito foto: Liam Pozz en Unsplash
Durante la primera semana de mayo 2021, los precios de las materias primas como la madera, se incrementaron drásticamente. Las cotizaciones se dispararon, debido a una oferta limitada de estos recursos y una fuerte demanda tras la vigorosa recuperación de la economía mundial.
La tendencia al alza de las materias primas en su conjunto, se da en medio de un despegue de la economía mundial posterior a los estragos de la pandemia. Incluso grandes inversionistas como Warren Buffet, advirtió a los inversores de la recuperación de estos elementos de la producción. El magnate comentó que muchas de las empresas que componen su cartera, había experimentado un "aumento en la inflación sustancial" en medio de la escasez de materias primas en la economía.
Ante esta recuperación de la economía, muchos materiales industriales también se están recuperando. Un ejemplo es el precio del cobre que se acerca a su nivel record obtenido en febrero 2011 por un impulso en la demanda. Posterior al aumento exacerbado de las materias primas, también se dio un aumento en la inflación de los precios al consumidor tras incorporar los aumentos de los insumos de diferentes productos.
Cabe aclarar que el aumento de precios de las materias primas y los aumentos en los precios de diferentes productos, son fenómenos diferentes pero con una estrecha relación. Esto, ya que los consumidores finales no se ven afectados automáticamente por los aumentos de precios en el cobre o la madera, sino solo cuando los productos terminados hechos de esos materiales reflejan los aumentos de los insumos.
No obstante, gran parte de esta inflación en los precios de las materias primas al productor, generalmente se refleja en aumentos más que proporcionales en los productos finales manufacturados. Lo anterior se debe a una mayor capacidad de los productores para traspasar los costos más altos a los consumidores en un entorno de exceso de liquidez en el mundo, con gran cantidad de efectivo en el poder de la gente.
Otra de las consecuencias de lo anterior, es el aumento de la demanda de oro como cobertura contra la inflación en cuanto se empiezan a encarecer los precios de las materias primas. Así, el mercado al alza del oro que comenzó en 2019, ahora está sufriendo una corrección a la baja, contrario a las demás materias primas. No obstante, en el futuro podría sumarse al alza de las otras commodities como opción para invertir ante la escasez de estos materiales en la recuperación de la economía.