Ciudad de México,
Ali Figueroa
Crédito foto: Sergio Cara (NotiPress)
De acuerdo con Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), la Ley de Ingresos y el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2022 parten de un escenario económico desfavorable. Expertos del sector reportaron que el indicador oportuno de la actividad económica (IOAE) anticipó un crecimiento de 0.1% luego de un repunte de actividades terciarias. Con base en las predicciones agregaron, la economía mexicana podría retroceder 1% del Producto Interno Bruto (PIB), así como presentar un dinamismo interrumpido.
Según su análisis, consultado por NotiPress, la inversión bruta fija cerró 2.0% por debajo de los niveles anteriores a la pandemia, mientras el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) disminuyó 1.6%. Esta cifra representa su mayor contracción en los últimos 15 años, y se suma un modesto rebote en las actividades secundarias, cuyo crecimiento fue de 0.4% en agosto.
Durante septiembre la población ocupada registró dos meses consecutivos en descenso, lo que contrasta con la recuperación percibida en julio de este año. Al respecto datos del CEESP indicaron, la pérdida de empleos fue de 544 mil en dicho mes, por lo cual la cantidad total de empleados y trabajadores es 600 mil menor al nivel visto antes de la pandemia. La población con disponibilidad laboral, quienes permanecen en la búsqueda de empleo, supera por 3.2 millones al primer semestre de 2021. Lo anterior figura como obstáculo para cumplir con el presupuesto de egresos planteado por las autoridades.
Otros factores de deterioro económico se vieron reflejados en la eliminación de la subcontratación laboral. Datos de finales de 2020 proporcionados por la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) indicaron, en México hay más de 2.9 millones de empleados y trabajadores contratados bajo esquema de outsourcing. La subcontratación es idónea para las empresas, en tanto les permite atender mejor las actividades para el crecimiento y desarrollo de los negocios, informaron especialistas de Red Human para NotiPress
Si bien la Covid-19 generó daños al mercado laboral y el ingreso en los hogares, el sector privado indicó que la deficiencia en los programas gubernamentales no se manejaron adecuadamente. Bajo esta línea el gasto en servicios de salud presentó un incremento de 40.5% con respecto al 2018. Factor que golpeó el gasto de las familias en diversos ámbitos, con consecuencias directas sobre los indicadores de pobreza. Desde dos años antes de la pandemia, 15.6 millones de personas perdieron acceso a los servicios de salud por tales motivos. "Con una mejor operación podrían haber ayudado a la población durante la crisis sanitaria", comentó.
Especialistas del sector privado comentaron que el congreso no considera la desaceleración económica en su análisis para aprobar el paquete económico 2022. Bajo esta línea la percepción oficial resulta optimista, y puede desencadenar dificultades importantes a partir de sobrestimar los ingresos públicos. De no atender la problemática detectada por el sector habrá un contexto de riesgo por posible insuficiencia de recursos al ejercer el presupuesto 2022, concluyó el CEESP.