Ciudad de México,
Emiliano Fuentes
Crédito foto: Steve Johnson on Unsplash
Para cerrar la tercera semana de mayo 2020, la moneda mexicana tuvo una importante apreciación de poco más de 5.10% cotizando alrededor de 22.74 pesos por dólar, tocando un mínimo de 22.70 pesos que no se veía desde mucho antes de la pandemia por coronavirus. Dicho importante avance del peso se debe a varios factores, dentro de los que destacan, en opinión de Banco Base:
El primer factor se observó durante la semana un debilitamiento generalizado del dólar estadounidense y el índice ponderado del dólar registró una pérdida semanal de 0.91%. En el mercado de deuda la tasa de interés implícita en Estados Unidos hacia el cierre del año se ubica en -0.10%. Esto indica que el mercado está especulando con la posibilidad de que la Reserva Federal (Fed) adopte tasas de interés negativas en los próximos meses, a pesar de los oficiales de la Fed han señalado, no está dentro de sus planes.
La especulación a favor del peso se debe a que el país ofrece tasas de interés más atractivas, al mismo tiempo que la mayoría de los bancos centrales a nivel global mantienen posturas monetarias altamente acomodaticias. En la semana, la tasa de rendimiento de los bonos mexicanos emitidos en dólares a 10 años mostró un descenso de 67 puntos base a 3.48%, indicando una mayor demanda por estos instrumentos.
Segundo, en los mercados financieros globales prevalecieron las ganancias, ante la expectativa de una reactivación económica gradual, a pesar de que los casos de coronavirus siguen en aumento. En el mercado de materias primas, el precio del WTI registró un incremento semanal de 13.8%, cotizando en 33.49 dólares por barril, acumulando un avance de 97% en las últimas cuatro semanas. El incremento del precio del petróleo favoreció a las divisas de países productores de petróleo y de algunas economías emergentes. El rand cerró la semana con una apreciación de 5.59%, el real brasileño se apreció 5.53%, el dólar neozelandés se apreció 2.68% y la corona noruega 2.32%.
Por otro lado, en México se observó un incremento de la inflación en la primera quincena de mayo, ubicándose en una tasa interanual de 2.83%, mientras que la inflación subyacente se ubicó en una tasa interanual de 3.76%. Hacia el futuro, el panorama para la inflación permanece incierto, pero con el dato más reciente los riesgos podrían comenzar a sesgarse al alza. Por este motivo, el mercado especula que Banco de México podría ser más cauteloso para recortar la tasa de interés en los próximos meses.
Apreciación del peso mexicano durante la semana abre la puerta a apreciaciones adicionales, pero no está descartada la devaluación. Esta es la segunda semana consecutiva que las apuestas en contra del peso superan las apuestas a favor de la divisa en momentos de suma incertidumbre por la pandemia.