Foto: Gustavo Torres (NotiPress)
La informalidad laboral en el Estado de México aumentó durante el tercer trimestre de 2025, alcanzando al 57.2% de la población ocupada, equivalente a 4 millones 613 mil 292 personas, según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI. Esta cifra representa un incremento de 6.98% respecto al mismo periodo del año anterior y de 1.31% frente al segundo trimestre del año.
Contrastando, la población ocupada total disminuyó 1.01% en comparación con el trimestre anterior, al pasar de 8 millones 152 mil 117 a 8 millones 066 mil 434 personas, aunque la entidad continúa encabezando el país en número de personas empleadas. A nivel nacional, las entidades con mayor participación económica fueron Baja California Sur, Colima, Yucatán, Nayarit y Quintana Roo.
Durante este periodo, el Estado de México registró una tasa de desocupación del 3.7%, con 308 mil 066 personas sin empleo. En cuanto a subocupación, el número ascendió a 377 mil personas, representando el 4.7% de la población ocupada. El sector terciario concentró mayor parte de los trabajadores con 5.7 millones de personas, seguido por el sector secundario con 1.8 millones, y el sector primario con 421 mil 728 personas.
Pablo Mejía Reyes, del Centro de Investigación y Ciencias Económicas de la UAEMex, advirtió sobre un estancamiento económico nacional reflejado en la baja generación de empleo formal. "La creación de empleo formal muestra una desaceleración continua, principalmente en trabajos eventuales", declaró. También atribuyó esta situación a factores como las políticas migratorias del gobierno estadounidense, las reformas judiciales en México y el aumento de la inseguridad en diversas regiones del país.
En cuanto a la informalidad, los niveles más altos del país se observaron en Oaxaca (80.1%), Guerrero (77.2%) y Chiapas (77.0%), mientras que el Estado de México se mantiene por debajo de estas cifras pero con una tendencia al alza.
Respecto al cierre de año, Mejía prevé una recuperación moderada impulsada por eventos como el Buen Fin y las prestaciones decembrinas, aunque advirtió que la manufactura mexiquense continúa estancada. Sobre los nuevos impuestos previstos para 2026, consideró que no tendrán un impacto significativo en la recaudación ni en el consumo.
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