Ciudad de México,
Noelia Acuña
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
El Estado de México se prepara para participar en una importante prueba nacional del Sistema de Alertamiento mediante mensajes SMS el lunes 19 de agosto. Esta prueba simulará un sismo y tiene como objetivo evaluar la capacidad del sistema para enviar alertas a través de teléfonos celulares en todo el país.
La iniciativa está organizada por la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) y respaldada por el Centro Nacional de Comunicación (CECOM) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). En ese sentido, la prueba busca comprobar la efectividad del sistema sin la necesidad de internet o aplicaciones adicionales. Además, este ensayo determinará la viabilidad de implementar alertas SMS en emergencias futuras y mejorar la seguridad de la población.
Asimismo, la prueba se realizará en todo el país y no requerirá que los usuarios cuenten con internet ni descarguen aplicaciones adicionales. Los mensajes de alerta se enviarán de manera gratuita a cualquier teléfono móvil, independientemente del operador de telefonía. El objetivo es verificar la eficacia del sistema para enviar notificaciones rápidas y efectivas en caso de emergencias.
Con esta evaluación, la CNPC buscará determinar si existe capacidad técnica para implementar la alerta vía SMS en el próximo Simulacro Nacional, programado para el 19 de septiembre. Es importante destacar que, aunque el enfoque inicial de la prueba es en sismos, la finalidad del sistema de alerta es más amplia. Se pretende utilizar para comunicar emergencias de diversa índole a nivel nacional.
Finalmente, con la implementación de este sistema podría representar un avance en la comunicación de emergencias, permitiendo a las autoridades enviar alertas de manera inmediata a toda la población, sin las limitaciones de las aplicaciones y la conectividad a internet. La capacidad de alertar a los ciudadanos rápidamente y de manera efectiva puede ser importante en situaciones de desastre, ayudando a reducir riesgos y mejorar la seguridad pública. El mecanismo supone una mejora con respecto a las alertas sísmicas sonoras adoptadas en varios estados de México, como en la Ciudad de México.