Foto: cortesia White House
China y Estados Unidos mantienen una estrecha comunicación sobre temas de aranceles para productos, dijeron funcionarios de Pekín y Washington, días antes de entrar en vigor aranceles para productos chinos en Estados Unidos.
El presidente Donald Trump escribió en Twitter que Estados Unidos está muy cerca de concretar un acuerdo comercial con China.
Durante una sesión informativa en Beijing, Gao Feng, portavoz del ministerio de comercio chino, dijo a los periodistas que los equipos económicos y comerciales de ambas partes mantienen una comunicación estrecha.
Los mercados bursátiles se movieron de manera positiva tras el comentario de mandatario estadounidense, y el Standard & Poor's alcanzó un máximo histórico, ganando un 0.85% durante la jornada del 12 de diciembre.
Negociadores estadounidenses han ofrecido reducir las tasas arancelarias existentes en 360 mil millones de dólares en productos chinos en hasta un 50 por ciento, dijo una persona informada sobre las negociaciones. También ofrecieron suspender los aranceles, los cuales entrarán en vigor el 15 de diciembre, informó Wall Street Journal.
Hasta el momento la Casa Blanca no hizo comentarios sobre ninguna oferta.
Gao Feng declinó hacer comentarios sobre posibles medidas de represalia si Washington impone más aranceles a los productos chinos.
Estados Unidos debe imponer, el 15 de diciembre, aranceles a casi 160 mil millones de dólares de importaciones chinas, como consolas de videojuegos, monitores de computadora y juguetes.
Se espera una reunión entre Trump con principales asesores comerciales el 12 de diciembre para discutir la medida.
Jared Kushner, yerno del presidente estadounidense, recientemente asumió un papel más importante en las negociaciones comerciales y se encuentra entre los asesores impulsores de la reversión arancelaria del 50%.
Analistas de Capital Alpha Partners esperan que Trump anuncie un retraso en las tarifas arancelarias por más de 30 días.
Una decisión de proceder con los gravámenes del 15 de diciembre podría afectar los mercados financieros y obstaculizar las conversaciones entre las dos naciones hasta después de las elecciones presidenciales de Estados Unidos en noviembre de 2020. La guerra comercial de 17 meses entre las dos economías más grandes del mundo tienen frenado el crecimiento global y ha disminuido las ganancias y la inversión para las empresas de todo el mundo.
Ambos países acordaron en octubre de 2019 concluir un acuerdo comercial preliminar, pero Beijing se opone a las demandas de Estados Unidos de que promete comprar una cantidad específica de productos agrícolas. Pekín también exige la reducción de los aranceles existentes.
Beijing dijo que tomaría represalias si Estados Unidos intensifica la disputa comercial.
Cabe recordar que en agosto pasado, el país asiático dijo que impondría aranceles adicionales del 5 y del 10% sobre 75 mil millones de dólares en bienes estadounidenses en dos lotes. Los aranceles en el primer lote comenzaron el 1 de septiembre, afectando a los productos estadounidenses, como la soja, carne de cerdo, carne de res, productos químicos y petróleo crudo.
De no llegar a una negociación, un segundo lote de productos se activará el 15 de diciembre y afectarán a productos que van desde maíz y trigo hasta aeronaves.
En el mismo sentido, China también dijo que restablecerá el 15 de diciembre un arancel adicional del 25 por ciento para los vehículos fabricados en Estados Unidos y 5% para piezas de automóviles.
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