Foto: Fiat Chrysler
Las juntas directivas de Fiat Chrysler y Peugeot firmaron una fusión vinculante para convertirse en el cuarto mayor fabricante de automóviles del mundo con la escala para enfrentar los desafíos de las regulaciones de emisiones más estrictas y la transición a nuevas tecnologías de manejo.
A través de un comunicado se informó que el grupo estará liderado por el director general de reducción de costos de PSA Peugeot, Carlos Tavares; el presidente de Fiat Chrysler, John Elkann, como director de junta; y el CEO de Fiat Chrysler, Mike Manley, permanecerá en el mismo cargo, con distintas actividades a las llevadas con anterioridad.
No se ha decidido el nombre de la nueva compañía, dijeron los ejecutivos, pero tanto Tavares como Manley insistieron en que no era un tema delicado.
Se espera que la fusión genere más de 4 mil millones de dólares en ahorros al año, los cuales se invertirán en la nueva era de la movilidad sostenible y cumplir con las estrictas nuevas regulaciones de emisiones, particularmente en Europa.
La entidad fusionada operará con velocidad y eficiencia en una industria automotriz, la cual experimentará cambios rápidos y fundamentales.
El desarrollo de nuevas tecnologías incluyen motores electrificados, conducción autónoma y conectividad, parte de lo que Tavares describió como "la transición a un mundo de movilidad limpia, segura y sostenible". Ambas compañías se han retrasado en el desarrollo de automóviles eléctricos.
Los ejecutivos esperan que el acuerdo tarde entre 12 y 15 meses en cerrarse y la fusión de ambas empresas creará un consorcio con ingresos de casi 180 mil millones de dólares y producirá 8.7 millones de automóviles al año, justo detrás de Volkswagen.
Según el acuerdo, no se cerrarán plantas bajo el acuerdo y lograrán ahorros al compartir inversiones en plataformas de vehículos, motores y tecnología, mientras se aprovecha la escala en las compras.
Cabe señalar que las acciones de Fiat Chrysler subieron casi el 1% en Milán, mientras que Peugeot ganó 2 por ciento en las operaciones de París.
Tanto las marcas Peugeot como Fiat son fuertes en tecnología de automóviles pequeños, con una superposición significativa en Europa. Manley dijo que la convergencia de plataformas sería un objetivo inicial que probablemente llevará dos años alcanzar.
Mientras tanto, el acuerdo le dará a Peugeot la oportunidad de vender en el mercado estadounidense, donde no tiene mucha presencia. Con 2 mil 640 distribuidores en Estados Unidos, Fiat Chrysler será red de distribución.
Finalmente, con la fusión de Fiat Chrysler y PSA Peugeot, la nueva compañía tendrá su sede legal en Holanda y comercializaran unidades en los mercados de París, Milán y Nueva York con el objetivo de convertirse en el cuarto mayor fabricante de automóviles del mundo.
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