Ciudad de México,
Francisco Vicario
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress)
Estados Unidos, a través del Departamento de Comercio, anunció un acuerdo preliminar con Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) para incrementar la producción de semiconductores. Este pacto tiene como objetivo apoyar la construcción de instalaciones de fabricación de semiconductores de vanguardia en territorio estadounidense, un movimiento que promete revolucionar el sector y fortalecer la economía nacional.
Durante las décadas recientes, Estados Unidos vio disminuir su participación en la producción mundial de semiconductores, pasando de casi el 40% a poco más del 10%, una situación que ha planteado vulnerabilidades significativas en términos de seguridad económica y nacional. Sin embargo, la reciente legislación, conocida como la Ley CHIPS y Ciencia, parte esencial de la Agenda Invertir, está diseñada para revertir esta tendencia. La medida busca recuperar la capacidad productiva y la innovación en el ámbito de los semiconductores, esenciales para una amplia gama de productos, desde smartphones hasta sistemas de armamento.
El acuerdo con TSMC representa un hito importante en este esfuerzo. La compañía comprometió una inversión total de 65 mil millones de dólares para la construcción de una tercera fábrica de chips en Phoenix, Arizona. Esta inversión no solo incrementa significativamente la capacidad de fabricación de semiconductores en Estados Unidos sino que también generará más de 25 mil empleos directos en construcción y manufactura, además de miles de empleos indirectos. Las instalaciones producirán los chips más avanzados del mundo, situando a Estados Unidos en la ruta para alcanzar el 20% de la producción mundial de semiconductores de última generación para el año 2030.
La colaboración entre TSMC y el gobierno de Estados Unidos también incluye una inversión de 50 millones de dólares en fondos CHIPS para la capacitación y desarrollo de la fuerza laboral local. Este enfoque garantiza que los trabajadores no necesiten abandonar sus ciudades de origen para acceder a empleos bien remunerados en industrias innovadoras.
Esta estrategia de revitalización de la industria de semiconductores en Estados Unidos resalta el interés en el regreso a la vanguardia tecnológica. El compromiso renovado del gobierno estadounidense con TSMC y su inversión en Arizona reflejan una actualización sobre la producción de manufactura de semiconductores, asegurando la autonomía y liderazgo tecnológico en el escenario global.