Ciudad de México,
Fernanda Martínez
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El presidente ruso, Vladímir Putin, suspendió la participación de Rusia en el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas, conocido como START III o Nuevo START. De esa manera, los rusos dan por terminados los tratados de control de armas nucleares firmados con Estados Unidos.
"Me veo obligado a anunciar hoy que Rusia suspende su participación en el tratado sobre armas estratégicas ofensivas. Reitero: no sale del acuerdo, sino que suspende su participación", afirmó el mandatario sobre el acuerdo Nuevo START acordado por los dos países en 2010.Durante su discurso anual ante la Asamblea Federal, Putin detalló que para reanudar su participación, Moscú debe comprender cómo se contabilizará el arsenal conjunto de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Según explicó, a principios de febrero de este año, la OTAN declaró que 'de facto' exigía regresar a la implementación del tratado, incluyendo la admisión de inspecciones a las instalaciones nucleares y de defensa de Rusia.
Además, el presidente reiteró que Washington piensa realizar pruebas de armas nucleares, por lo cual el país está preparado en probar armas nucleares en caso de ser necesario.
En 2010, tanto Rusia como Estados Unidos firmaron el nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas, el cual entró en vigor el 5 de febrero de 2011. Es el elemento más reciente de una serie de acuerdos de armas entre ambas potenciales, los cuales iniciaron a finales de la Guerra Fría y se aceleró tras la caída de la Unión Soviética. El primer START fue firmado en 1991 y START II dos años después.
Con una duración inicial de 10 años, el Nuevo START fue prorrogado por cinco años más en 2021. El tratado cuenta con numerosos protocoles, sin embargo, se puede dividir en dos grandes obligaciones.
Primero, el tratado limita el número de ojivas nucleares desplegadas a mil 550 con un plazo de siete años para cumplir dicha obligación. Asimismo, se limita el número de medios de lanzamiento a 800 y el número de sus desplegados y listos para usar a 700.
Su segundo gran pilar es la contemplación de medidas de verificación del cumplimiento del Tratado. Es decir, de manera periódica se realizan intercambios de información y se pueden realizar hasta 18 visitas anuales a las instalaciones nucleares de cada país.
Entre Moscú y Washington se concentra el 90 por ciento de todas las armas nucleares que existen en el mundo. De esa manera, la posible ruptura del Nuevo START podría abocar al fin del control de la carrera nuclear.