Ciudad de México,
Jorge Cerino
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Durante la administración del expresidente Donald Trump, se desató un conflicto diplomático entre Estados Unidos y Corea del Norte. Esto a raíz del sexto ensayo nuclear norcoreano en 2017, y un aumento en los ejercicios militares con tropas estadounidenses en Corea del Sur, a partir de aquel año. Actualmente éstas ascienden a 26,540 militares, según el Centro de datos de mano de obra de defensa de Estados Unidos. Ante esta tensión existente entre ambos países, la llegada del presidente Joe Biden ha levantado curiosidad sobre cuál será su postura, especialmente ante las declaraciones recientes de Kim Yo Jong, hermana del líder de Norcorea.
Kim Yo Jong, quien es subdirectora del Departamento del Frente Unido del Partido del Trabajo de Corea, lanzó una advertencia a Estados Unidos en un discurso este 16 de marzo. Según reportan medios internacionales, el motivo fue la llegada de funcionarios de la administración Biden para conversaciones de alto nivel en Japón y Corea del Sur. "Si Estados Unidos quiere dormir en paz durante los próximos cuatro años, es mejor que se abstenga de causar un hedor en su primer paso", reportan que mencionó.
Aunque esta es la primera declaración proveniente de Corea del Norte hacia Estados Unidos desde que Biden ocupó la oficina presidencial, Kim Jong-un, líder supremo del país, ya ha expresado su postura respecto a Biden previamente. Durante la primera semana de enero, Kim Jong-un llamó a expandir el armamento nuclear del país y señaló a Estados Unidos como su mayor enemigo, reportó su agencia de noticias estatal. Según expresó el líder supremo del país, las políticas estadounidenses respecto a Corea del Norte nunca cambian, sin importar quién se encuentre en la presidencia.
Sin embargo estas declaraciones no cerraron la puerta por completo, pues el líder norcoreano también señaló que los pequeños acuerdos alcanzados con la administración Trump podrían servir de base para futuras negociaciones. Durante su campaña Biden dijo, se reuniría con Kim Jong-un si Corea del Norte aceptase reducir su capacidad nuclear. Medios estadounidenses citan fuentes cercanas a la administración Biden, quienes llaman por un acercamiento más pragmático, mientras una revisión de las políticas estadounidenses respecto a Norcorea se espera para abril. Reportan también múltiples intentos de contacto con Corea del Norte de parte de la administración Biden desde febrero, aún sin respuesta.
De acuerdo a la organización sin fines de lucro Consejo de relaciones exteriores, prevenir una guerra interestatal coreana, como un colapso interno de Corea del Norte son intereses críticos de seguridad nacional de Estados Unidos. Entre los riesgos que la organización identifica se encuentran las pruebas de armas, así como las provocaciones militares y cibernéticas a pequeña escala ante el riesgo de una escalada mayor potencialmente incontrolable.
La situación entre ambos países es la de un conflicto entre intereses opuestos, con ambas partes mostrando poca disposición a ceder. Aunque los indicios apuntan a una postura más pragmática de parte de Biden, parece difícil que Corea del Norte ceda ante la petición de un desarme nuclear. Aunque al interior de Estados Unidos parezca mucha la diferencia entre Trump y Biden, la política exterior estadounidense respecto a sus enemigos políticos no muestra indicios de un cambio significativo.