Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
Alrededor del 52 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de México es aportado por las pymes, las cuales generan más del 70% de los empleos. Sin embargo, durante la pandemia de Covid-19, muchos de estos negocios quebraron y otros pocos se mantuvieron a flote gracias a diferentes procesos de digitalización.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Ventas Online (AMVO), seis de cada 10 pymes realizan ventas en línea. Sin embargo, para muchas no es accesible lograr la digitalización que los clientes demandan.
Patricio Hernández Bishop, cofundador y director de Finanzas de Mibi, comentó a NotiPress que el reto para las empresas va más allá de tener un comercio electrónico. Con la apertura de los canales digitales, se empezó a usar videoconferencias y la nube, pero ahora el reto es mayor, pues se necesitan digitalizar más operaciones, por lo cual existen soluciones como el Business Process Outsourcing (BPO).
El BPO es una estrategia que permite a las empresas subcontratar ciertas funciones o procesos de su negocio a un proveedor externo especializado en esas áreas. El objetivo es mejorar la eficiencia operativa, reducir costos y permitir que la empresa se enfoque en sus actividades principales y estratégicas.
Hernández Bishop explicó los beneficios para las empresas que implementan el BPO; pues, cuando un negocio subcontrata procesos ve una serie de puntos positivos, entre ellos:
- Reducción de costos al no tener que invertir en la infraestructura y recursos necesarios para realizar las tareas internamente.
- Personal se enfoca en las actividades principales, logrando centrarse en su núcleo de actividades esenciales.
- Flexibilidad y escalabilidad a las fluctuaciones de la demanda, permitiendo aumentar o reducir los servicios subcontratados según las necesidades de cada pyme.
- Mejora significativa en la calidad y eficiencia de los procesos subcontratados.
Las empresas que realizan BPO son expertos en los procesos que manejan, por lo cual respaldas a sus clientes al transmitir su experiencia y recursos especializados. En ese sentido, una pyme puede aprovechar la experiencia y recursos de profesionales altamente capacitados.
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