Foto: Javier Quesada en Unsplash
Convertir una catástrofe en una fuente de crecimiento, confianza y prosperidad fue uno de los retos a los cuales empresas alrededor del mundo se enfrentaron con la llegada del Covid-19. En un principio se proyectaron precios negativos del petróleo, a la vez que autoridades monetarias anunciaron políticas expansivas sin precedentes, y de la igual forma, un pronóstico incierto para múltiples industrias.
Esto desencadenó una serie de debates en torno a la naturaleza probabilística de la pandemia y sus efectos futuros adicionales, así como su impacto en la actividad económica mundial y nacional. "No todo lo que ha ocurrido es catastrófico y en medio de condiciones tan desafiantes como las que azotaron al mundo durante el 2020, algunas empresas han surgido más fuertes y vigorosas", comentó para NotiPress, Santiago Botero Jaramillo, CEO de Finsocial.
Asimismo, Botero señaló, el primer paso para la consolidación de su compañía a raíz de la emergencia sanitaria fue el salto a lo digital. Esto debido a que el origen de créditos de libranza se caracteriza por su complejidad operativa, donde anteriormente se solía requerir la presencia física del cliente. No obstante, el confinamiento ocasionó la cancelación del contacto directo entre el consumidor y el personal; gracias a esto se reformaron los procesos tecnológicos y se desarrolló una plataforma.
"Este salto digital no se logró desde cero, nuestra transformación digital comenzó en 2018, pero la presión de la pandemia agilizó los procesos que en otras circunstancias habrían tomado años". El CEO de Finsocial agregó, para transitar este camino, tuvieron que converger hacia los requisitos regulatorios ya existentes, así como a los próximos a implementarse en materia de origen de crédito digital.
Otra pieza fundamental a resolver radicó en la diferencia generacional de los clientes y su enfrentamiento con las nuevas tecnologías. Para ello, Finsocial capacitó a su equipo de ventas para facilitar la ayuda y atención a los consumidores durante su migración a la digitalización. El desafío también consistió en la estructuración y desarrollo de nuevos créditos, los cuales se adaptaran a las recientes condiciones financieras y de flujo de caja ante la pandemia.
Mientras tanto, las lecciones aprendidas por las empresas con la llegada del Covid-19 radicaron en la implementación del impulso del uso de la nube para la organización y almacenamiento de datos. Así como el fomento a la cultura digital, debido a su acelerado incremento, y la adaptación a una nueva modalidad de trabajo como el home office, según expertos.
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