Foto: Gustavo Torres (NotiPress)
En la década reciente, la economía de México creció anualmente 1.1 por ciento, sin embargo, la población incrementó 1.4 por ciento, resultando en un incremento mínimo del 0.3%. Así lo explicó Enrique Quintana, director editorial de El Financiero, durante el panel México 2033, organizado por Serfimex Capital. Con esto, argumentó que la economía en México estuvo estancada los 10 años recientes. Sin embargo, considera, México tiene oportunidad de fortalecer su economía bajo las circunstancias políticas actuales.
Especialistas consideran que la relocalización y reorganización a nivel global, que se vive actualmente por las tensiones entre China y Estados Unidos, podrían beneficiar a México. En el contexto internacional, aumenta el interés de empresas de Asia y otras partes del mundo para establecerse en México con el objetivo de tener mayor desarrollo.
"Pocos países pueden verse beneficiados por el nearshoring y México es uno de ellos", dijo Quintana
Durante el panel México 2033 en Expo Santa Fe en la Ciudad de México el 12 de septiembre de 2023, analistas coincidieron, este potencial debe ser aprovechado por México. Para ello, son necesarios acuerdos económicos al margen de los cambios partidistas y la política.
Factores como la ubicación geográfica y el contexto político, sumado a los tratados comerciales de la región, dan a México una posición privilegiada para desarrollarse económicamente vía una estrategia de nearshoring. Pese a ello, esto no se dará si no se resuelven ciertos temas, especialmente en materia de derecho. Al respecto, México ha caído progresivamente en el ranking de competitividad global del Instituto para el Desarrollo Gerencial, teniendo actualmente la posición 55 de 64 países contemplados. La creciente baja se debe a la falta de desarrollo en crecimiento del derecho, especialmente en el rubro de educación.
Tratados comerciales y el perfil demográfico del país con personas de promedio 29 años de edad, sumado a estabilidad política, generan una circunstancia excepcional para México. Ante ello, la relocalización industrial a nivel global cobra sentido y genera la posibilidad de beneficiar a la economía mexicana.
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