Sector empresarial también es un actor a favor de generar un crecimiento incluyente

 07-10-2019
Redacción

 

   

 

Mantener la estabilidad macroeconómica es fundamental para conservar la confianza a mediano y largo plazo. No obstante, no deben ser los únicos indicadores, sostuvo Raúl Beyruti Sánchez, presidente de GINgroup a nivel global. Lo dijo durante su participación en el Foro Forbes 2019, mismo que participaron el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, Alejandro Díaz de León, gobernador del Banco de México y Laurentino Cortizo Cohen, presidente de Panamá, entre otros invitados destacados.

El empresario mexicano sostuvo, "debemos partir de que no puede haber crecimiento en ningún país sino es incluyente". Refirió así, el crecimiento no únicamente se detona en algunos sectores o regiones de nuestro país, también se tienen que observar los sectores más vulnerables y desfavorecidos de la población.

Si las compañías privadas no están convencidas de ser agentes de cambio y apoyar a los gobiernos a generar crecimiento en todos los sectores de la población, se convierten en parte del problema, situación que impide crezcan y no solo una parte de los mexicanos.

Beyruti a enfocado su compañía en generar proyectos para que los sectores de la población que han quedado rezagados en México tengan las mismas oportunidades ofrecidas a todos los mexicanos. Recientemente fue convocado a participar junto a otras empresas globales a la coalición Business for Inclusive Growth (B4IG), con el objetivo de crear sinergias con los gobiernos a fin de impulsar el crecimiento incluyente.

"Los emprendedores deben ser apoyados por nosotros los empresarios porque son el futuro del país y son la imagen que deben de ver nuestros hijos sobre lo que quieren ser", dijo el empresario en un comunicado.

La educación constituye una de las claves en la modernización de México dada su capacidad de dotar al país del capital humano necesario para crecer de manera sostenida, alcanzar una mayor integración social y desarrollarse plenamente. Durante los 50 años recientes, el acceso a la educación ha pasado del 1% al 26.2% en el grupo de jóvenes entre 19 y 23 años de edad.

Se convierte en una cuestión fundamental del sector privado, apoyar iniciativas de crecimiento incluyente a fin de dar oportunidades a las siguientes generaciones.