NASA/Joel Kowsky (WikiCommons: Public Domain) (foto sin cambios)
El 3 de agosto de 2021, la empresa Boeing abandonó su segunda misión de prueba de carga no tripulada a la Estación Espacial Internacional (ISS por sus siglas en inglés). Esto debido a un retraso en el lanzamiento de su nave espacial Starliner, diseñada para vuelos tripulados, ocasionado por un problema técnico. De acuerdo con Patricia Bielling, portavoz de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA por sus siglas en inglés), el 4 de agosto se intentará un nuevo lanzamiento. Y ante ello la portavoz mencionó: "La NASA, Boeing y United Launch Alliance (ULA) han borrado el intento de lanzamiento del 3 de agosto de la Prueba de Vuelo Orbital-2 de la agencia a la Estación Espacial Internacional. Esto por indicaciones inesperadas de posición de la válvula en el sistema de propulsión Starliner".
Como contexto, Boeing en otras ocasiones ya ha tenido complicaciones en sus lanzamientos, pues en 2019 fue su anterior intento para llevar a los astronautas de la NASA a la ISS. En este lanzamiento, su nave Starliner contenía al cohete Atlas V el cual despegó y ejecutó su vuelo de forma correcta. Sin embargo, antes de que Starliner se separara del cohete, la nave espacial capturó el tiempo transcurrido de la misión incorrecto de su vehículo de lanzamiento Atlas V. Error que provocó la nave disparara de manera errónea sus propulsores y quemara demasiado combustible para alcanzar una órbita adecuada.
Este lanzamiento fallido en 2019 no fue bueno para Boeing, pues de acuerdo con el medio ArsTechnica la NASA inició una investigación sobre la cultura de seguridad de Boeing. A lo cual Boeing también acordó pagar un segundo vuelo de prueba, a un costo de 410 millones de dólares, con sus propios recursos. Por su parte, en ese mismo año, su competencia SpaceX ya había completado una prueba de vuelo satisfactoria sin tripulación de su nave espacial Crew Dragon.
Aunque Boeing cuente con los recursos para competir con empresas como SpaceX en cuanto a los viajes al espacio, debido a sus endebles protocolos de seguridad no ha logrado un lanzamiento exitoso. Pues una misión exitosa de su nave espacial Starliner podría mejorar la reputación de Boeing después de luchas técnicas y administrativas. No obstante, la compañía todavía tiene muchas mejoras que realizar a su nave espacial y cohete Atlas V. Es por ello, la NASA sigue pidiendo a la compañía mejore su seguridad y protocolos para que pueda llegar su nave Starliner a la Estación Espacial Internacional en 2021.
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