Foto: NASA/William Pendrill
Recientemente, los investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT por sus siglas en inglés) y la Universidad de Oklahoma en Estados Unidos descubrieron a 332 años luz (distancia muy cercana a la Tierra) un objeto conocido como enana marrón, la cual es muy grande para ser considerada un planeta, pero no tan voluminoso para entrar en la clasificación de estrella, la diferencia radica en su núcleo incandescente.
Los científicos de ambas instituciones indicaron que el descubrimiento podría ser de gran ayuda con el propósito de aprender más sobre la creación de los planetas. Las enanas marrones son el eslabón perdido entre los planetas gigantes de gas y las estrellas más pequeñas. Por su brillo tenue son muy difíciles de identificar en el cielo nocturno. Al igual que algunas estrellas, las enanas marrones pueden desarrollar un anillo a su alrededor provocados por la colisión gravitacional de gas y polvo, ocasionando la creación de un tipo de planetas.
Steven Silverberg, astrofísico de la Universidad de Rice y ahora miembro del equipo Chandra/HETG, quienes estudian los fenómenos de las enanas marrones, aseguró a través de un informe publicado por el Instituto Kavli de Astrofísica e Investigación Espacial del MIT que gracias a los telescopios de alta potencia y varios aficionados a la astronomía es posible localizar cuerpos celestes tan interesantes como las enanas marrones.
"Tenemos múltiples aficionados a la astronomía que miran cada objeto y dan su propia opinión del fenómeno. A partir de ahí, un equipo de científicos realiza un seguimiento de los objetos en el espacio y poco a poco se van clasificando utilizando métodos científicos, telescopios muy sofisticados a fin de concluir si realmente se trata de algún nuevo planeta, una estrella, una enana marrón o incluso una nueva galaxia", afirmó.
El descubrimiento de la enana marrón llamada W1200-7845 fue encontrada a través de Disk Detective, un proyecto subsidiado por la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) de Estados Unidos y donaciones de miles de personas alrededor del mundo. Además, el proyecto está abierto al público en un sitio oficial llamado Zooniverse, donde se encuentran imágenes de objetos en el espacio, el objetivo de la página es que los aficionados a la astronomía o cualquier persona puedan adentrarse al universo digital y clasificar los cuerpos celestes con el un potencial de albergar planetas.
Mientras tanto, el equipo de investigadores se encuentra trabajando en una nueva versión del proyecto Disk Detective donde incluirán imágenes de un estudio del cielo completo desde el cual pueda observarse de una mejor manera la mayor parte de la bóveda celeste por medio de bandas ópticas de alta resolución; esto con el fin de encontrar más objetos espaciales que puedan dar como resultado el hallazgo de nuevas enanas marrones, estrellas, o incluso, encontrar vida en otros planetas
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