Ciudad de México,
Martín Olivera
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress)
Luego del reciente cierre parcial del gobierno de Estados Unidos se renovaron las preocupaciones sobre la solidez del sistema financiero tradicional, generando un repunte en el interés por activos digitales como Bitcoin. Este evento ocurre cuando el Congreso no aprueba a tiempo la legislación presupuestaria, obligando a múltiples agencias a suspender funciones o reducir su operatividad.
Miles de trabajadores federales clasificados como no esenciales enfrentan la interrupción de sus labores sin garantía de salario inmediato debido al llamado shutdown. Al mismo tiempo, sectores clave como la aviación, seguridad nacional y servicios médicos mantienen su funcionamiento, aunque sus empleados tampoco reciben pagos durante el cierre.
Además del efecto en la fuerza laboral, el cierre detiene la publicación de indicadores económicos cruciales, como los informes de empleo o inflación, lo que dificulta el análisis por parte de inversores y autoridades monetarias. Esta interrupción de datos incrementa la incertidumbre general y afecta las decisiones de política económica.
En este contexto, Bitcoin gana visibilidad como una posible alternativa al dinero fiduciario. El diseño descentralizado de este activo y su emisión limitada lo posicionan como refugio frente a decisiones gubernamentales impredecibles. De acuerdo con defensores del activo digital, "un activo cuya emisión es matemáticamente predecible y no depende del capricho político de ningún congreso ofrece un refugio de valor superior".
De todas maneras, el comportamiento de los mercados tradicionales muestra matices. Índices como el S&P 500 y el Dow Jones suelen mantenerse estables durante los primeros días del shutdown. Esto se explica porque "el Shutdown es un problema de presupuesto de gastos, no de solvencia", lo cual reduce la percepción de un riesgo inmediato de impago por parte del Tesoro.
En ciertos sectores financieros, el cierre incluso se interpreta como un freno temporal al endurecimiento de la política monetaria. Si el estancamiento legislativo reduce la actividad económica, la Reserva Federal podría pausar futuras subidas de tasas de interés. Esa expectativa genera un impulso adicional en activos de riesgo, incluidos algunos criptoactivos.
A menudo descrito como "oro digital", Bitcoin capta la atención de quienes buscan protegerse de decisiones fiscales inesperadas. El cierre del gobierno, al evidenciar vulnerabilidades estructurales en la gestión del gasto público, refuerza esta narrativa. Aun así, la respuesta del mercado no siempre es lineal.
En escenarios de incertidumbre extrema, los inversores tienden a priorizar liquidez inmediata y activos de bajo riesgo. "En un escenario de aversión al riesgo extremo, los inversores tienden a vender activos volátiles, incluido Bitcoin", según análisis de comportamiento financiero documentado en anteriores cierres.