Foto: Josue Díaz (NotiPress)
En 2022, los ciberdelincuentes recibieron 456.8 millones de dólares por el secuestro de datos, sin embargo fue una caída de 40.3 por ciento en comparación con 2021, cuando obtuvieron 756.6 millones de dólares. El 2022 representó la caída más baja en tres años en los ingresos totales por ransomware, según el último informe sobre criptodelincuencia de Chainalysis.
Kim Grauer, director de investigación de Chainalysis explicó a NotiPress que a pesar de la disminución en los pagos, no significa que los ataques hayan disminuido. Según explicó, la disminución de ingresos se debe a la falta de voluntad de las víctimas de pagar sus demandas de rescate.
Lo anterior, puede ser consecuencia de un mayor uso de soluciones, tales como copias de seguridad y recuperación para mitigar el impacto de los ataques. También influye el temor a incumplir las normas gubernamentales que prohíben el pago de rescates a organizaciones posiblemente afiliadas a grupos sancionados.
De acuerdo con el informe, el porcentaje de fondos por secuestro de datos destinados a las principales plataformas creció al 48.3% en 2022. Por su parte, el porcentaje destinado a cambios de alto riesgo cayó de 10.9% en 2021 a 6.% en 2022.
Los servicios ilícitos para lavar dinero proveniente de ataques de ransomware también registro una caída. El uso de mixers, servicios que mezclan criptodivisas de muchos usuarios para ocultar los orígenes, creció del 11.6% al 15%.
Sin embargo, el número de cepas únicas de secuestro de datos se disparó en 2022. La investigación de la empresa de ciberseguridad Fortinet, afirmó que más de 10 mil cepas únicas estuvieron activas en la primera mitad del 2022. No obstante, la vida útil del ransomware pasó de 265 días en 2020 a 70 días en el 2022.
Grauer advirtió que las apariencias engañan y de hecho, todo parece indicar una saturación en el mundo del ransomware con un gran número de organizaciones compitiendo entre sí. Pese a la gran cantidad de cepas activas durante el año, el número de personas que integran el ecosistema del ransomware es probablemente reducido, declaró el director.
Datos on-chain confirman lo anterior, pues revelan casos de monederos únicos que reciben grandes pagos relacionados con diferentes cepas de ransomware en distintos momentos. Al rastrear los monederos, se puede trazar la evolución de la industria del ransomware, explicó Grauer. En ese sentido, la transparencia de la cadena de bloques permite a los investigadores detectar los intentos de cambio de marca en cuanto se realizan.
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