Ciudad de México,
Patricia Manero
Crédito foto: Freepik
De acuerdo con diversos estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las alergias son el cuarto padecimiento crónico más preocupante alrededor del mundo y estima, para 2050 el 50 por ciento de la población mundial padecerá de alguna. Asimismo, el 89 por ciento de los casos tienen un impacto directo en la piel, generando enrojecimiento, malestar, dolor y picor.
Según la Academia Española de Dermatología y Venereología, las alergias cutáneas son uno de los motivos de consulta más frecuentes para un especialista. Estas se producen cuando el cuerpo genera una respuesta inmunitaria exagerada frente a sustancias identificadas como extrañas, o diferentes factores ambientales, contaminación, genética o cambios de estilo de vida.
Las manifestaciones clínicas de la alergia en la piel varían dependiendo del mecanismo por el cual se originen, pero las más frecuentes son la urticaria y el eccema. La primera consiste en la aparición de habones en la piel con mucho picor; en ocasiones, se acompaña de dolor abdominal, hipotensión o dificultad para respirar si la reacción alérgica es muy intensa; el segundo es una reacción inflamatoria de la piel, donde se manifiestan eritema, pápulas, vesiculas, costras y descamación, producida por diferentes mecanismos.
Bajo esta línea, la dra. Paula Torres, dermatóloga y asesora médica de La Roche-Posay México explica en un comunicado enviado a NotiPress, "Los pacientes que son asociados con alguna alergia cutánea, deben nutrir la capa de la piel para limitar la permeabilidad de alérgenos y así evitar inflamaciones, es recomendable usar todos los días cremas y aceites hidratantes en las partes expuestas de la piel, especialmente si son sensibles o secas, de igual manera aconsejaría mantenernos alejados de los productos químicos y de los detergentes fuertes para evitar estas reacciones".
En este sentido, La Roche-Posay introdujo al mercado mexicano a Toleriane Dermallergo, un serum con una fórmula que permite aliviar y reparar la capa de la piel en función de limitar los riesgos de brotes alérgicos. Esta solución es adecuada para el cuidado de las pieles extremadamente sensibles o con tendencia alérgica.
Dicha crema dermatológica sienta sus bases en la neurosensina, un activo con alta eficacia calmante que ayuda a reducir los signos de sensibilidad en la piel, además de ser enriquecido con osmolitos, un aminoácido que protege las células del ambiente, que ayuda a reforzar la barrera cutánea para así evitar la pérdida de agua de la piel logrando reducir las reacciones cutáneas como hormigueo, sensación de comezón, enrojecimiento, entre otras.
A pesar de los pronósticos que estiman, para 2050 el 50 por ciento de la población padecerá de algún tipo de alergias, marcas como La Roche-Posay siguen apostando en el cuidado de las pieles sensibles a través de productos dermatológicamente probados con el objetivo de mantener y asegurar una buena calidad de vida a quienes las padecen.