Ciudad de México,
A Amigon
Crédito foto: Foto de Anna Shvets en Pexels
Diversos son los tratamientos que psicólogos y neurocientíficos investigaban para las enfermedades y trastornos mentales que aquejan a la población global. Un estudio reciente hecho por un equipo de la Universidad de California intentó comprobar la eficacia de la estimulación cerebral mediante pulsos eléctricos en el tratamiento de depresiones graves.
Investigadores del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de California en San Francisco realizaron un estudio publicado en la revista Nature Medicine. En él, se buscaba probar la eficacia de la estimulación cerebral profunda en pacientes con depresión severa.
Al ser el cerebro una serie de redes neuronales activas mediante la conexión en milivoltios, se tiene la teoría que una estimulación externa parecida podría intervenir en disfunciones neurológicas. Sin embargo, en la práctica la estimulación cerebral resulta más compleja pues mapear las áreas afectadas en depresión son diferentes en cada individuo.
En el estudio se especifica el proceso con una mujer estadounidense cuyos anteriores tratamientos no habían sido de ayuda ante la severa depresión. Durante 10 días se enviaron pulsos eléctricos a través de electrodos implantados en el cerebro mientras era monitoreada en el hospital.
Como resultado, la paciente experimentó cambios en sus niveles de ansiedad así como una mejoría en su estado de ánimo y energía luego de ráfagas de alta frecuencia de 1 a 40 minutos. Este método de estimulación invasiva de baja frecuencia permitió a su vez identificar las áreas en el cerebro afectadas por el trastorno.
"En un minuto ella decía ‘siento como si estuviera leyendo un buen libro’", describió Katherine W. Scangos, psiquiatra en la Universidad de California y autora principal del estudio. "Debido a que la depresión se presenta de manera diferente en diferentes personas, es probable que involucre múltiples circuitos neuronales".
Otro estudio fue realizado por investigadores del Departamento de Psicología y Ciencias Neuronales de la Universidad de Boston. En este se describe el proceso de estimulación cerebral en pacientes con comportamientos obsesivo-compulsivos como un tratamiento no invasivo y eficaz, a diferencia del primer estudio levemente invasivo.
Si bien los psiquiatras se encuentran lejos de medicar una estimulación cerebral profunda en pacientes con enfermedades o trastornos neuronales, estos estudios abogan por considerarlo. Puede que en el futuro, trastornos o enfermedades graves puedan ser tratadas a través de estímulos eléctricos en el cerebro para al menos aliviar los síntomas.