Ciudad de México,
Navila Phillips
Crédito foto: Ivan Díaz en Unsplash
A quince meses de la declaración de pandemia por Covid-19 por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que 2,79 millones de vacunas fueron administradas alrededor del mundo. Actualmente, existen siete vacunas que cuentan con aprobación para uso de emergencia y más de doscientas están en fase de ensayos clínicos, de acuerdo con la OMS. En la mayoría de las inoculaciones, las personas reciben dos inyecciones del mismo laboratorio, separadas en un periodo de tiempo de entre 4 a 12 semanas. Sin embargo, autoridades sanitarias de diversos países plantean la posibilidad de combinar vacunas de distintas farmacéuticas, a fin de obtener mayores beneficios. A continuación, Corroborado, unidad de fact checking de NotiPress, examina la información hasta ahora conocida sobre el tema.
El acto de mezclar inmunizaciones recibe el nombre de "refuerzo primario heterólogo", es una técnica que fue utilizada en el pasado para combatir diversos virus como el ébola, influenza y VIH. Las razones que motivan a combinar las vacunas de Covid-19 son la escasez de dosis, el surgimiento de nuevas cepas y peligrosos efectos secundarios tras la aplicación de algunas vacunas. No obstante, la principal razón es la posibilidad de potenciar los beneficios de inmunización en las personas, lo cual podría ayudar a mitigar los casos graves de Covid-19. Actualmente, investigadores de múltiples países conducen ensayos clínicos para determinar si esta técnica puede o no brindar ventajas significativas.
De acuerdo con informes del gobierno de Alemania, el pasado martes 22 de junio de 2021 la canciller Angela Merkel completó su esquema de vacunación con dosis de dos laboratorios diferentes. El 16 de abril habría recibido la primera dosis de AstraZeneca y el 22 de junio la segunda de Moderna. Este suceso se suma a los crecientes casos de dosis combinadas en Europa, tras la postura de suspender la vacunación con AstraZeneca por el reporte de trombosis en la población joven. Sin embargo, la OMS recomienda continuar con la forma tradicional de vacunación y advierte sobre la falta de evidencia científica de esta práctica.
Por su parte, la Universidad de Oxford conduce el ensayo Com-Cov, a fin de estudiar la manera en que el sistema inmunológico responde ante la combinación de inyecciones. El estudio analiza la intercambiabilidad de AstraZeneca, Pfizer, Moderna y Novavax. A la par, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos anunciaron el 1 de junio de 2021 el arranque de un ensayo que investigará sobre la eficacia y seguridad de esta técnica, aplicando las vacunas de Johnson & Johnson, Moderna y Pfizer a 150 individuos.
Si bien, la mayoría de los estudios se encuentran en una fase inicial, ya se pueden consultar algunos resultados preliminares. Por ejemplo, investigadores españoles del Hospital Universitario La Paz en Madrid, anunciaron resultados positivos ante la aplicación de una dosis de AstraZeneca seguida de una de Pfizer. Por otro lado, los resultados preliminares de Com-Cov sugieren, la mezcla de vacunas podría derivar en un aumento de los efectos secundarios leves y moderados durante las primeras 48 horas. No obstante, esto podría ser consecuencia de una respuesta inmunitaria fuerte.
Mientras tanto, cada vez más países buscan practicar la vacunación combinada alrededor del mundo. Entre las naciones que ya ejecutan esta acción o consideran hacerlo están Bahrain, Emiratos Árabes, Corea del Sur, Italia, España, Canadá, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos. En el caso de Latinoamérica, actualmente Argentina desarrolla un ensayo con el Instituto Gamaleya y AstraZeneca, el cual estudia la intercambiabilidad de las vacunas. No obstante, esta técnica aún no ha sido aprobada por dicho país. De avanzar en las investigaciones y demostrar los beneficios de esta práctica, es probable que en el futuro más países cambien su política de inmunización a favor de la combinación de vacunas.